La exgerente del PP asegura que no le consta “que nadie tomara la decisión” de destruir los ordenadores de Bárcenas

MADRID
SERVIMEDIA

La exgerente del PP y actual tesorera del partido, Carmen Navarro, aseguró este jueves en el juicio por el borrado de los ordenadores de Luis Bárcenas que no le consta “que nadie tomara la decisión” de destruir los equipos y apuntó que a las acusaciones “tampoco les debe constar cuando la atribuyen a la persona jurídica” que hace referencia al PP y no a una persona concreta.

Como los otros dos acusados, Navarro, anunció que sólo respondería a las preguntas de la Fiscalía y de su defensa. Fue nombrada gerente del PP en julio de 2010 y tesorera en mayo de 2012. En varios momentos de su declaración se mostró muy molesta por estar acusada: “Soy gerente del partido, si eso es un delito, sí, soy gerente”.

Navarro reconoció que el jefe de los servicios informáticos, José Manuel Moreno, depende de ella y explicó que cuando ocupó el puesto de gerente se encontró con que “no había inventario de ordenadores, ni siquiera de los edificios del PP. Hacía falta profesionalizar la gestión en todos los ámbitos. Se hicieron procedimientos en todas las áreas. Lo único que había era un inventario contable con ordenadores de más de 20 años sin dar de baja”.

Su llegada a la gerencia, dijo, supuso la estandarización de procedimientos y una auditoria de los sistemas informáticos. Más allá, explicó Navarro, “me enteré de que (Bárcenas) tenía una sala en la planta tercera que se le dejó para que guardara transitoriamente sus pertenencias. Me pareció lo más normal del mundo que a una persona que llevaba 20 años en el partidos se le dejara un espacio para que tuviera transitoriamente sus pertenencias”.

La acusada dijo con ironía que a Bárcenas no se le veía con frecuencia en la sede del PP de la calle Génova. De hecho, aseguró que nunca habló con él y que, “de frente, lo he visto un día que me lo encontré en un pasillo”.

Navarro sabía que le estaban investigando, “pero yo soy economista no soy abogada”, lo que sí garantizó es que en ese momento “no había ninguna investigación en marcha sobre el PP, sólo a última hora de la 'trama Gürtel' se acusa al PP como partícipe a título lucrativo”.

Sin embargo, la investigación sobre la fortuna en el extranjero de Luís Bárcenas, propicia una conversación de Navarro con la entonces secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, citada como testigo en esta causa, “y es ella la que decide que no se le permita entrar en Génova. Lo hablamos, pero la decisión no la tomo yo”.

A partir de ese momento “yo me despreocupo porque el asunto queda en manos del jefe de la asesoría jurídica”. El 1 de marzo Bárcenas le remite un burofax “en el que me pide los ordenadores y es entonces cuando me entero de que se ha desalojado la Sala Andalucía” donde el extesorero tenía sus efectos personales y los tres ordenadores.

Navarro aseguró que no fue ella la que dio orden de desalojar la Sala Andalucía. “No entendía que tuviera que preocuparme para nada de este asunto. ¿Por qué iba a dejar nadie ninguna información en una sala del partido en la que puede entrar todo el mundo?. Allí no iba a tener los millones, ni los `papeles de Bárcenas´”. A ella, aseguró, no le interesaba “lo más mínimo lo que tuvieran esos ordenadores ¿Qué iban a contener?”.

Ya interrogada sobre las cuentas del PP, Navarro insistió en asegurar que “desde que yo estoy no hay ninguna ´contabilidad B´ en el PP, la contabilidad que hay, está auditada”. Insistió en que no cree “que decirle a Bárcenas que no podía entrar en la sede del partido sea ningún tipo de delito. Todavía no sé qué delito estoy encubriendo, ni sé a quién estoy encubriendo. Encubrir al señor Bárcenas me parece un poco fuerte, que yo encubra a una persona que no conozco”.

(SERVIMEDIA)
20 Jun 2019
SGR/gja