Así respondió Jáuregui cuando fue preguntado, al término de su intervención en el Círculo de Bellas Artes de Madrid en unas jornadas económicas, por las palabras del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, en las que confiaba que las actuales turbulencias financieras sean "la última curva, el último obstáculo" de volver al crecimiento económico.

El jefe del Ejecutivo comparó anoche la crisis con una "sinuosa y estrecha carretera de montaña en la que, cuando apenas hemos dejado atrás la última curva conjurando el riesgo de que el coche derrape", se vislumbra ya "el peligro que asoma en la curva siguiente".

Jáuregui aclaró que se trata de una "metáfora" en la aludía que la salida de la crisis es "una marcha complicada en la subida de una montaña con muchas curvas".

"Creo que la metáfora no puede llevarnos a elevar a categoría la conclusión. Yo pienso que el presidente, mejor que nadie, sabe que estamos subiendo la montaña todavía, esto es evidente, y como país y como Europa tenemos un largo recorrido que tenemos que afrontar juntos", añadió.

Mas allá de los comentarios metafóricos, el ministro resaltó que las autoridades europeas, políticas y económicas, están destacando especialmente en los últimos días que España "está recorriendo un camino de reformas muy severo, muy riguroso y muy serio".

Por ello, subrayó que el Gobierno está empeñado en dar la "máxima seriedad y rigor" a las medidas de cumplimiento de los objetivos de déficits en todas las administraciones públicas.

Pese a la "situación de turbulencias que viven los mercados" y a las particulares "dificultades" de algunos países de la zona euro, dijo que "no hay ninguna posibilidad de que una moneda tan fundamental como es el euro pueda estar en juego".

A su juicio, hay que impulsar una "mayor coordinación presupuestaria, fiscal, y de las políticas macroeconómicas y ya llegará, quizás, la emisión de bonos comunes", concluyó.