Así se pronunció Robles, en una entrevista en RNE recogida por Servimedia, en la que defendió que el Ejecutivo ha estado “desde el principio” buscando una solución concertada en el seno de la UE, como lo evidencia el acuerdo suscrito entre España, Alemania, Francia, Luxemburgo, Rumanía y Portugal para acoger a los migrantes embarcados en el ‘Open Arms’.

Esto le sirvió para atacar al ministro del Interior italiano, Matteo Salvini, de quien dijo que es “inaceptable” que no permita el desembarco de los migrantes en el puerto de la isla italiana de Lampedusa a pesar de que existe un acuerdo entre seis países de la UE para acogerlos, de tener la garantía de que ninguno de ellos se quedará en suelo transalpino y de los requerimientos de la justicia de su país que le conminan a hacerlo.

Afirmó que una de las exigencias del ejercicio de la política es “empatizar” ante “situaciones de emergencia” como la que se vive en el barco de la ONG española, lo que le sirvió para anunciar que “en las próximas horas” el Gobierno aportará una “solución más”, que se sumará al ofrecimiento que hizo el domingo para que el ‘Open Arms’ desembarcara en los puertos de Algeciras (Cádiz) y Mahón (Menorca). “En las próximas horas ofreceremos una solución en clave de emergencia humanitaria ante la que nadie puede mirar hacia otro lado”, dijo.

Contrapuso la actitud “generosa y solidaria” de España con la intransigencia de Salvini, a quien censuró que “las vidas humanas no le importan nada” y lamentó que éste se mueva en “clave electoral” después de haber hecho saltar por los aires su coalición de Gobierno con el Movimiento 5 Estrellas.

También instó a que la UE aborde seriamente la cuestión migratoria, más allá del drama del ‘Open Arms’, ya que la llegada de inmigrantes a Europa se produce como consecuencia de la guerra, la desigualdad y el hambre en sus países de origen.

Por ello, conminó a los ministros del Interior comunitarios a aprovechar su próxima reunión para ponerse manos a la obra y auguró que el ministro de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación en funciones, Josep Borrell, tendrá “un gran trabajo por delante” en lo referido a la migración en la frontera sur de la UE como el próximo 1 de noviembre se convierta en el nuevo jefe de la diplomacia europea.

A su vez, atribuyó al “desconocimiento” y a su escasa experiencia en política migratoria a escala internacional las críticas al Gobierno del presidente del PP, Pablo Casado, y de la portavoz de Vox en la Asamblea de Madrid, Rocío Monasterio, en la gestión de la crisis del ‘Open Arms’. Esto le sirvió para reclamar sensatez, prudencia y sentido del Estado, ya que “no vale todo” en cuestiones como la migración.

Por último, eludió “entrar en debate” con la ONG española ante las críticas que ésta ha formulado al Gobierno y llamó a centrarse en atajar el “drama humano” que viven los migrantes del ‘Open Arms’.