Solo en el mes de julio, las pernoctaciones hoteleras superaron los 43,2 millones el pasado mes de julio, lo que representa un 1,1% más que en el mismo periodo de 2018, y encadenan cuatro meses de ascensos.

Las pernoctaciones de viajeros residentes en España aumentaron un 4,7%, mientras que las de los no residentes descendieron un 0,6%. La estancia media bajó un 2,1% en tasa interanual y se situó en 3,6 pernoctaciones por viajero.

Por destinos, Andalucía, Comunidad Valenciana y Cataluña fueron los principales elegidos por los viajeros residentes en España en julio, con tasas anuales de variación en el número de pernoctaciones del 6%, 5,6% y 3,1%, respectivamente.

Mientras, el principal destino elegido por los viajeros no residentes fue las Islas Baleares, con un 34,7% del total de pernoctaciones. En esta comunidad las pernoctaciones de extranjeros bajaron un 1,6% respecto a julio de 2018.

En julio, se cubrieron el 71% de las plazas ofertadas, con un incremento anual del 0,2%. El grado de ocupación por plazas en fin de semana creció igualmente un 0,2% y se situó en el 75,9%.

Islas Baleares fue la comunidad autónoma que presentó el mayor grado de ocupación durante el séptimo mes del año, con un 87,1%, seguida de Canarias (77,7%) y Comunidad Valenciana (74,2%).

Atendiendo al país de origen de los viajeros, los procedentes de Reino Unido y Alemania concentraron el 25,5% y el 17,4%, respectivamente, del total de pernoctaciones de no residentes en hoteles en julio. El mercado británico creció un 1,2%, mientras que el alemán descendió un 11,8%.

Por otra parte, la tasa anual del Índice de Precios Hoteleros (IPH) se situó en el 1,1% en julio, lo que supone 2,2 puntos menos que la del mes pasado y 0,5 puntos por debajo de la registrada hace un año.

Por comunidades autónomas, las mayores subidas de precios hoteleros en tasa anual se dieron en Navarra (7,5%) y Cantabria (5,6%). Por el contrario, el mayor descenso se registró en la Comunidad Valenciana, con una variación del –1,5% respecto a julio de 2018.

En lo que respecta a la rentabilidad del sector hotelero, la facturación media diaria de los hoteles por cada habitación ocupada (ADR) fue de 102,8 euros en julio, lo que supone un aumento del 1,7% respecto al mismo mes de 2018.

Por su parte, el ingreso medio diario por habitación disponible (RevPAR), que está condicionado por la ocupación registrada en los establecimientos hoteleros, alcanzó los 76,9 euros, con una subida del 2,5%.

Por categorías, la facturación media fue de 212,0 euros para los hoteles de cinco estrellas, de 111,5 euros para los de cuatro y de 88,2 euros para los de tres estrellas.