Así lo indicaron este miércoles ambos socios en un encuentro celebrado con el presidente de Abante, Santiago Satrústegui, el director general corporativo financiero de Mapfre, Fernando Mata, y el director general del área corporativa de inversiones de la aseguradora, José Luis Jiménez, para explicar un acuerdo inédito para ambas compañías.

Mapfre desembarca en la primera firma de banca privada en España con la compra de un 10% del capital y la opción de duplicar dicha participación, hasta alcanzar el 20%, en tres años; y Abante dará entrada por primera vez desde su fundación en el año 2002 a un inversor corporativo.

La incursión permitirá a Mapfre nombrar a un consejero en la firma que actualmente gestiona activos por valor de 3.500 millones de euros de un total de 7.800 clientes y dispone de oficinas en Barcelona, Valladolid, Sevilla, Málaga y Zaragoza. Su máximo órgano de dirección se ampliará así a siete vocales, junto a los tres consejeros internos y tres externos que posee actualmente.

El objetivo abrazado por ambos socios es claro: dar soluciones globales, financieras y de aseguramiento, a ciudadanos adelantándose tanto al desafío que supone la situación actual de tipos de interés al cero por ciento como al reto de la longevidad y jubilaciones futuras de sus potenciales clientes, según detallaron los ejecutivos.

Mapfre será ahí el proveedor exclusivo de seguros con productos ya en catálogo y otros a diseñar entre ambos, junto a las soluciones financieras de Abante.

Para desarrollar la alianza han creado un comité de coordinación que se reunirá con una cadencia quincenal y lanzarán grupos de trabajos para los temas específicos que vayan detectando a fin de ponerlos en marcha.

En recámara, el presidente de Abante refirió que está abordar los productos financieros y soluciones nuevas para ofrecer a clientes, empujar junto con Mapfre la digitalización en el servicio de asesoramiento y, a más largo plazo, "exportar" el modelo de banca privada de la firma en el exterior.

Según refirió no hay, a priori, mercados predefinidos porque depende de aspectos tan dispares como las oportunidades de negocio o la regulación, si bien subrayó el liderazgo que Mapfre tiene en Latinoamérica y señaló que hay países como México, Perú o Colombia donde puede verse que "necesitan tener soluciones parecidas".

El responsable de Inversiones de Mapfre precisó a su vez que dicha internacionalización se efectuará "con tranquilidad" para "hacerlo bien", recordando que la aseguradora opera en 45 países y ampliando así el espectro más allá de Latinoamérica.

Satrústegui abrió la puerta además a incorporar otras firmas no aseguradoras al proyecto en el futuro, sugiriendo la opción de que sean independientes como es Abante. "No es lo más inmediato, pero sí estamos pensando que pueda haber gente que se quiera incorporar", refirió.

La invitación llega después de la alianza haya consagrado la autonomía de Abante tras la incursión de Mapfre. El responsable financiero del grupo puso en valor precisamente el interés de la aseguradora por socios especialistas que ayuden a desarrollar el negocio especializado y aclaró que la apuesta de Mapfre es por Abante como socio, de forma que cualquier oportunidad que surgiese en este ámbito solo sería abordada en acuerdo entre ambos.

Ambos socios indicaron que no buscan impulsar a las compañías en los rankings o ganar tamaño y volumen por una suma de carteras, sino encarar el desafío que se abre a futuro en materia de gestión de activos sobre todo pensando en el reto de la longevidad y la futura jubilación.

La alianza prevé destinar la inversión íntegra de Mapfre, que ambos socios prefieren mantener sin detallar, al desarrollo de esta plataforma y negocio.