España cronifica su pobreza con más de 10 millones de personas que la sufren

- Tendría que sacar de la pobreza a más de 2,6 millones de personas en un año para cumplir los compromisos con la UE

MADRID
SERVIMEDIA

España está más lejos que hace diez años de cumplir sus compromisos con la Unión Europea en materia de pobreza, ya que actualmente existen algo más de diez millones de españoles en riesgo con una tasa de pobreza del 21,5%, que sólo se ha reducido una décima en un año, lo que significa una “estabilización” y no una “reducción” de estos niveles, según la Red Europea de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social (EAPN).

En 2008, España selló un compromiso para sacar de la pobreza a alrededor de un millón y medio de personas en el marco de la Estrategia Europa 2020. A un año de que venza el plazo, el número de quienes tendrían que salir de la pobreza para cumplir con este plan ha aumentado y ya son un total de 2,6 millones, dado el azote que supuso la crisis económica.

Según el informe presentado este miércoles en el Senado por la EAPN, 190.000 personas dejaron de estar en riesgo de pobreza o exclusión entre el 2017 y el 2018 en base a la tasa Arope, que mide distintas variables para considerar cuándo una persona está en riesgo. La tasa de pobreza, por su parte, sólo mide aquellas personas que se encuentran por debajo del 60% de la mediana de ingresos del país; es decir, que cobran menos de 8.870 euros al año.

Si en 2008 la tasa Arope era del 23,8% en España, diez años más tarde se encuentra en el 26,1%, casi tres puntos por encima. Su pico más alto fue en 2014, cuando el 29,2% de la población española se encontraba en riesgo de pobreza o exclusión social en base a este registro. Aún a día de hoy, hay 12,2 millones de personas en esta situación, sólo medio punto porcentual menos que hace un año.

“Existe un desajuste entre la recuperación de la economía y la reducción de la pobreza; no existe una correlación directa entre el crecimiento del PIB y la reducción de las personas pobres”, alertó el presidente de la EAPN en España, Carlos Susías, durante la presentación del informe. Y es que la recuperación de las personas, dijo, “está vinculada a medidas específicas de la erradicación de la pobreza”.

TRABAJADORES POBRES

Este documento también desmonta algunas tesis como que la creación de empleo consigue reducir los niveles de pobreza; de hecho, el 14% de las personas con empleo son pobres. “El grupo mayor de pobreza es el de personas empobrecidas con empleo. Cuando se nos dice que el empleo acaba con la pobreza, es una verdad a medias porque no viene en condiciones dignas”, afeó Susías.

Tanto es así que una de cada tres personas pobres mayores de 15 años tiene un trabajo, mientras que las que están desempleadas son uno de cada cuatro. Es decir, la pobreza está incluso más presente entre quienes están empleados, pero “su salario no les permite disponer de los recursos necesarios para satisfacer sus necesidades básicas”, recoge el informe.

Además, la recuperación no está llegando a los trabajadores con mayor riesgo. El 25% de la población más pobre, con rentas medias que no pasan de los 4.000 euros anuales, “no ha conseguido los ingresos que tenían en 2008 antes de la crisis” cuando, sin embargo, el 25% más rico consiguió ya en el año 2016 recuperar sus ingresos pre-crisis, declaró el presidente de la EAPN.

LOS JÓVENES, EL GRUPO DE EDAD MÁS POBRE

En edad, el grupo más vulnerable a la pobreza son los jóvenes de menos de 29 años. Su tasa de pobreza es del 33,8%; es decir, más de diez puntos porcentuales por encima de la tasa de pobreza que hay en España (21,5%). Le siguen los mayores de 65 años y los niños y niñas. La pobreza infantil se situó en el año 2018 en el 29,5%, según la tasa Arope. “Cuando hablamos de pobreza infantil, tenemos que hablar de pobreza en la familia porque no hay niño pobre en familia rica, ni niño rico en familia pobre”, explicó Susías.

En definitiva, el informe concluye que, mientras el sector más rico de la población superó la crisis en dos años, las personas en riesgo de pobreza y los colectivos más vulnerables siguen en ella nueve años después de su punto álgido, por que insta a impulsar medidas como la renta mínima de inserción o una prestación por hijo a cargo “suficiente”.

“Luchar contra la pobreza necesita de medidas económicas y fiscales; las entidades sociales llevamos mucho tiempo reclamando que no sólo tenemos que reunirnos y hablar con los ministerios con competencias en servicios sociales, sino que tenemos que hablar con Empleo, con Hacienda y con Economía”, destacó Carlos Susías.

Uno de los datos que más preocupan a las organizaciones que integran la EAPN es la población en pobreza severa (con menos del 30% de ingresos que la mediana nacional), una situación en la que están 2,6 millones de personas, es decir, una cuarta parte de la población pobre que, como destacó Susías, no tiene por qué ser aquella que se dedica a la mendicidad, sino simplemente aquellas familias que no pueden afrontar gastos imprevistos como, por ejemplo, comprar unas gafas nuevas a su hijo cuando se le rompen.

(SERVIMEDIA)
16 Oct 2019
GIC/gja