Ampliación

Debate electoral

Sánchez defiende su política social mientras PP y Ciudadanos contraponen sus logros en Andalucía

MADRID
SERVIMEDIA

El presidente del Gobierno en funciones y candidato de PSOE a la reelección, Pedro Sánchez, reivindicó este lunes en el debate para el 10-N sus logros en política social, mientras que los líderes de PP, Pablo Casado, y de Ciudadanos, Albert Rivera, reivindicaron los avances que dijeron estar consiguiendo desde que gobiernan en coalición en Andalucía.

Estos planteamientos se escucharon en el debate durante el bloque de política social e igualdad, que se inició con la apreciación de la periodista Ana Blanco -la presentadora junto a Vicente Vallés- de que en esta confrontación electoral para el 10-N todos los candidatos eran hombres.

Este aspecto fue reconocido por el propio Sánchez, quien, no obstante, destacó que su Gobierno es el que había tenido mayor número de ministras, al tiempo que defendió la política del PSOE contra la violencia de género. El presidente en funciones también recordó que su Gabinete ha aumentado las pensiones mínimas, ha aumentado el número de becarios y plantea para después del 10-N introducir un ingreso mínimo vital y la gratuidad de la educación 0 a 3 años.

A su vez, Casado acusó al PSOE de haber dejado en Andalucía miles de dependientes en lista de espera, algo en lo que también incidió Rivera, quien gobierna en coalición con los populares en la Junta andaluza. Asimismo, el líder del PP rechazó recibir “lecciones” de defensa de la sanidad pública por parte de los socialistas, al tiempo que señaló que los populares tienen otras propuestas destacadas en este terreno, como un MIR educativo a nivel nacional.

PACTO CONTRA LA DESPOBLACIÓN

Por su parte, Rivera defendió un “gran pacto contra la despoblación”, así como acabar con que la educación española esté fragmentada en 17 comunidades autónomas sin que haya nexos comunes. En este terreno social, el presidente de la formación naranja destacó la importancia de acabar con la barrera entre los trabajadores fijos y temporales, ya que crea desigualdades entre los españoles.

Mientras que el líder de Podemos, Pablo Iglesias, reprochó a los líderes del resto de partidos no haberse centrado en este bloque en hablar de políticas sociales, de forma que censuró que Sánchez hubiese pedido en este apartado que PP y Ciudadanos dijesen que no coincidían con el planteamiento de Vox de ilegalizar al PNV. En este sentido, el jefe de Ejecutivo acusó a los partidos de Casado y Rivera de ser la “derecha cobarde ante una ultraderecha agresiva”.

A su vez, el responsable de Vox, Santiago Abascal, apuntó que en política social hay que hablar “primero” de los españoles y luego de los inmigrantes, al tiempo que sostuvo que la igualdad en el conjunto de España se está viendo lesionada por el gasto de las autonomías.

'SÍ ES SÍ'

Por lo que se refiere a la violencia de género, Iglesias preguntó a Casado si comparte que su portavoz en el Congreso, Cayetana Álvarez de Toledo, pusiera en cuestión el 'sí es sí' a la hora de que una mujer acepte relaciones sexuales. “Este país no se merece que ninguna formación cuestione que sólo 'sí es sí'’”, enfatizó el líder de Unidas Podemos.

El presidente del PP le respondió que el Código Penal deja “muy claro el consentimiento” y recordó que en 1995 fue modificado por el Gobierno socialista “eliminando la calificación de violación” y se “recuperó” por el PP. Casado rechazó lecciones de violencia de género y sobre 'las manadas, a las que tildó de “jaurías”.

Por su parte, Abascal también comentó que no piensa admitir “ninguna lección ni en política social ni de protección de las mujeres”. Afirmó que hay que “garantizar la seguridad de las mujeres” y la igualdad “lesionada por el Estado de las autonomías” entre españoles.

(SERVIMEDIA)
05 Nov 2019
NBC/MFN/mjg