Tras formalizar sus actas como parlamentarios los representantes del PNV, su portavoz en el Congreso, Aitor Esteban, señaló que “hasta que no se vayan acercando las fechas, las posiciones de unos y otros y las posibilidades de llegar a un acuerdo siempre van a existir”. “Querer resolver este puzle esta misma semana me parece imposible”, apuntó sobre la investidura.

En este sentido, recordó que hasta el 3 de diciembre no se constituyen las Cortes y, por tanto, los grupos parlamentarios, si bien insistió en que todavía queda “trabajo por hacer” porque “no todo está hecho” pese a que “lo que parecía imposible" se ha realizado y "de repente (Pablo) Iglesias y (Pedro) Sánchez se dieron un abrazo en 48 horas”, lo que ha podido trasladar la imagen de que todo "está hecho”.

Aunque se mostró “optimista” con el futuro político, señaló que el PNV “todavía no ha dicho" cuál será el sentido de su voto, aunque reiteró que la voluntad de su partido "es intentar conseguir una estabilidad institucional" porque creen que hay que afrontar los problemas, tanto en el plano económico como político, y "si no hay un interlocutor estable en la mesa, en las instituciones, va a ser imposible”.

“Nosotros vamos a intentar promover esa estabilidad institucional, pero todas las partes deben poner algo desde cada uno para que esto pueda suceder”, reflexionó.

CATALUÑA

Por otra parte, Esteban defendió el diálogo entre gobiernos que se reclama desde Cataluña y lo ve como lo “más normal del mundo” y un aspecto que no debería escandalizar. “La reunión institucional deberíamos verla desde un prisma absolutamente normal”.

El portavoz del PNV en el Senado, Jokin Bildarratz, puso en valor la “pluralidad” existente en la Cámara Alta como reflejo del 10-N, donde nadie tiene ahora mayoría absoluta, y señaló que “Euskadi y Cataluña son dos realidades sociales diferentes”.