Antes del escrutinio de las papeletas, Zamarrón preguntó a los 349 diputados presentes en el hemiciclo si durante la segunda de la votación a la Presidencia del Congreso alguno no había sido llamado para ejercer su derecho al voto.

Ello motivó que Vehí se levantara de su escaño para advertir de que no se le había nombrado para votar. Tras hacer las oportunas comprobaciones con los letrados de la Cámara, Zamarrón reconoció la omisión, le permitió votar y se atribuyó la responsabilidad. “No sabe más el diablo por viejo, sabe menos. Póngalo en mi debe”, remachó.

Los dos diputados de la CUP, al igual que los de ERC, Junts y de EH Bildu, han votado nulo en las dos votaciones para elegir al próximo presidente del Congreso.