Puré de calabaza, pavo con dátiles y postre de yogur, menú sano y navideño para pacientes oncológicos

- Según MD Anderson Cancer Center Madrid

MADRID
SERVIMEDIA

Puré de calabaza, pavo asado y yogur podrían conformar un menú navideño muy adecuado y apetecible para un paciente oncológico, según el doctor Pedro Robledo, responsable de la Unidad de Nutrición Clínica y Dietética de MD Anderson Cancer Center Madrid.

Este centro hospitalario ofrece una serie de consejos para que los pacientes con cáncer puedan disfrutar de las comidas y cenas navideñas "como el resto de familiares y amigos", y propone una serie de claves con las que elaborar "un menú saludable, sabroso y adecuado".

Según Robledo, hay que atender "sobre todo al tipo de tumor, al tratamiento que reciba el paciente y a la fase de la enfermedad en la que se encuentre".

Junto a la clase de alimentos, "el tipo de cocinado y la frecuencia de consumo son aspectos importantes en la dieta", agregó Robledo.

Apuntó que los tratamientos con quimioterapia por vía intravenosa, la radioterapia o la inmunoterapia pueden producir alteraciones en el sabor, náuseas y estreñimiento, mientras que los pacientes en tratamiento hormonal padecen más problemas relacionados con el control del peso y alteraciones glucémicas y/o dislipémicas. Hay que tener en cuenta también las características de los pacientes que se han sometido a una cirugía y que pueden tener alteraciones en la deglución de los alimentos o malabsorción de nutrientes, prosiguió el doctor, lo cual puede provocar que la comida no se mueva de manera normal por el tubo digestivo.

Otro problema ante el que se encuentran los pacientes con cáncer se refiere al reparto energético de las 1.500-2.000 calorías, según necesidades, que las personas deben ingerir fraccionadas en cuatro o cinco tomas. Asimismo, Robledo señaló que “los pacientes en tratamiento no siempre son capaces de ingerir alimentos en horas establecidas, ya que pueden tener náuseas por las mañanas.

Debido a ello, estos pacientes realizan muchas veces una única comida fuerte al día, con lo que dicha comida no debe contar solo con un aporte calórico adecuado. "Es clave también revisar que esta tenga un alto contenido nutricional, en el que las proteínas juegan un papel principal", aclaró.

PROPUESTA DE MENÚ

El experto propone como entrante un puré de calabaza, muy adecuado sobre todo en pacientes con cáncer gástrico y cáncer de esófago “por su fácil absorción de los nutrientes y su fácil paso de boca a estómago". "Debido a su bajo aporte calórico, también puede ser una muy buena opción en pacientes con cáncer de mama, ovario o próstata, que están en tratamiento hormonal", agregó.

En su opinión, el pavo se presenta como una "opción muy adecuada como prlato principal", dado su alto nivel proteico (aporta más de 20 gramos de proteína por cada 100 gramos) y fácil digestión. Este puede proporcionar energía al músculo, al tiempo que estimula ciertas bacterias de la microbiota que pueden ejercer una función inmunomoduladora.

Además, prosigue, "cocinado con dátiles, aporta un extra de energía, muy recomendable en la mayoría de estos pacientes". No obstante, advirtió que "es importante controlar el aporte calórico en aquellos enfermos en tratamiento con platinos y paclitaxel, que pueden tener la función renal alterada".

PREVENCIÓN

Finalmente, el doctor señaló que "las condiciones de modificación culinaria en cuanto a temperatura y alto consumo energético pueden influir en el riesgo de origen y desarrollo de un cáncer".

A su juicio, "no se deberían consumir más de tres raciones de 125 gramos de carne roja a la semana, ni se debería cocinar a altas temperaturas, concretamente no a más de 130 grados centígrados". “Tampoco habría que consumir de forma muy frecuente ni alimentos cocinados en barbacoa ni carne quemada”, concluyó el doctor.

(SERVIMEDIA)
22 Dic 2019
AGQ/pai