Así lo dijo en unas declaraciones a la prensa junto a la secretaria de Políticas Sociales, Empleo y Seguridad Social de UGT, Mari Carmen Barrera, tras mantener una reunión con Escrivá para presentarle las peticiones de su organización de cara a la nueva legislatura calificada de “positiva” y con un nivel de coincidencia “amplio”.

Al ser preguntado sobre la subida de la base máxima de cotización para este año, que aún no se ha decidido, el dirigente de UGT se limitó a decir que el Gobierno “dentro de unos días empezará a hacer alguna de estas cuestiones”.

Explicó que el planteamiento de su sindicato es un plan a varios años para ver “cuál es el tope al que vamos” en la base máxima de cotización, ya que “eso ayudaría a las empresas a tener una visión de futuro”. Indicó que actualmente, el tope máximo se acerca a los 50.000 euros anuales, y citó que en Francia es superior a los 100.000 euros, con lo que “sería bueno ver cómo podemos acometer ese diferencial”, e indicó que con ello se podrían recaudar más de 7.000 millones de euros.

En contrapartida, señaló que eso “tiene que tener repercusión sobre la propia pensión” y señaló que el Ministerio tiene “algunas ideas importantes” al respecto que se discutirá “en los próximos meses”. Para Álvarez, el tope en relación a la edad de jubilación y las condiciones para jubilarse es el fijado en el acuerdo de 2011.

En este sentido, señaló que su postura es la de no “renegociar” ese pacto alcanzado en los inicios de la crisis, y que, de negociarse, UGT tratará de conseguir efectos “más favorables” a los pensionistas.

El dirigente sindical también planteó a Escrivá la petición que ya viene haciendo sobre derogar la reforma de 2013 “en un marco que permita dar tranquilidad a los futuros pensionistas” y volver con ello al marco de 2011.

A su juicio, esa derogación debe acometerse “cuanto antes” y “no tiene por qué impedir que en la comisión del Pacto de Toledo en el Congreso de los Diputados haya un debate sobre el tema” o que en una mesa de diálogo social tripartido se pueda abordar.

Otras propuestas de UGT presentadas al ministro hacen referencia a realizar un “mapa sobre las necesidades” del mercado de trabajo a varios años, con los perfiles laborales que se demandarán en España, y con ello, la formación que se requerirá también de las personas en paro; definir las necesidades en materia de migraciones en los próximos años; implantar la renta mínima vital, que se encuentra recogida en el acuerdo programático del PSOE y Unidas Podemos y cuya gestión estará en la vicepresidencia de Pablo Iglesias; el impulso del contrato relevo para que se extienda a más sectores y no solo al manufacturero o la petición de que el Ministerio estudie el coste de las incapacidades para los trabajadores de mayor edad o que una carrera de cotización de 40 años sea suficiente para jubilarse, con independencia de la edad.

Al ser preguntado por la aprobación de las tasas Tobin y Google en el Consejo de Ministros de mañana, martes, Álvarez señaló que es “extraordinariamente importante que el Gobierno dé un paso adelante” y establezca los nuevos impuestos porque “no se puede continuar diciendo que no se hace porque tienen que ser políticas fiscales globales”.

Aprovechó para tachar de “vergüenza” que multinacionales en España “estén compitiendo en unas condiciones que impiden que otras empresas puedan sobrevivir y que eso vaya a costa de derechos de los ciudadanos”. Del mismo modo, se alegró de que también se apruebe mañana la derogación del artículo del Estatuto de los Trabajadores que posibilita despedir por absentismo laboral reiterado, aunque sea justificado.