Según los datos publicados por el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, las pensiones de jubilación concentraron la mayor parte del gasto, al suponer 7.060,5 millones de euros, un 3,59% más que hace un año.

A las pensiones de viudedad se destinaron 1.706,55 millones de euros, con un crecimiento del 2,04% con respecto a marzo de 2019; en incapacidad permanente, el gasto fue de 945,84 millones, otro 2,04% más; a las prestaciones de orfandad se dedicaron 139,55 millones (2,08%) y a las prestaciones a favor de familiares se destinaron 25,3 millones, un 4,49% más.

La pensión media del Sistema, que comprende las distintas clases (jubilación, incapacidad permanente, viudedad, orfandad y a favor de familiares), alcanzó los 1.008 euros mensuales, lo que supuso un aumento interanual del 2,16%. La pensión media de jubilación ascendió a 1.157,97 euros, un 2,12% más respecto al año pasado.

Por su parte, la pensión media de viudedad, cuyas perceptoras fueron en un 92,05% mujeres, fue este mes de 723,22 euros al mes (1,99%).

En cuanto a las nuevas altas, la pensión media de jubilación se situó en los 1.452,84 euros mensuales en febrero, último dato disponible, frente a los 1.461,97 euros de hace un año, lo que representa un descenso del 0,62%. La pensión de jubilación del Régimen General se situó en 1.580,27, un 0,10% menos.

El conjunto del Sistema incluyó un total de 9.799.395 pensiones contributivas, un 0,97% más que el año pasado. El 62,22% del total, 6.097.333, fueron por jubilación; 2.359.666 correspondieron a prestaciones de viudedad; 958.824 a incapacidad permanente; 340.456 a orfandad y 43.116 fueron pensiones a favor de familiares.

Por comunidades autónomas, ocho regiones registraron una pensión media superior a la media nacional de 1.008 euros, destacando el País Vasco como la comunidad con la cuantía más elevada (1.252,55 euros). En el otro extremo, Extremadura fue la que se anotó la menor cifra (839,43 euros).