En la sesión de control al Gobierno en el Congreso de los Diputados, Rufián preguntó a Sánchez “cómo se plantea” esta legislatura, a lo que el presidente respondió que hace poco más de setenta días, poco después de la formación del Ejecutivo, “el escenario ha cambiado” y hay que dar respuesta a una pandemia “inédita” en los últimos cien años en España y en el mundo.

Sin embargo, precisó, el programa de Gobierno “permanece vigente, lo reivindico”, y lo considera “más que necesario que nunca” para afrontar los cuatro años de legislatura.

En ese sentido, Sánchez agradeció la abstención de ERC para facilitar su investidura como presidente del Gobierno y el apoyo en la convalidación de decretos leyes que han sido “importantes” para dar respuesta sanitaria, social y económica a la pandemia.

Rufián le agradeció sus palabras, pero la alertó de que hay una España “que alucina con ustedes” al ver que “hacen matemáticas en vez de política”, eligiendo para prorrogar el estado de alarma los diez votos de Ciudadanos a cambio de nada en vez de los trece de ERC “a cambio de medidas de izquierdas”.

A continuación, Rufián alertó a Sánchez de que es “tremendamente peligroso darle aire a la derecha”, y puso como ejemplo de ello al cesado Diego Pérez de los Cobos. Sus informes, dijo, “no son más falsos ahora porque les afecten” a miembros del Gobierno de lo que eran los de Alsasua o los de la consulta soberanista del 1 de octubre. “No miente ahora más cuando habla del 8M, ya mentía” entonces, denunció, con los informes que “llevaron a nueve demócratas catalanes a la cárcel y a otros tantos al exilio”. “Así de peligroso es dar aire a esta gente”, aseveró.

El compromiso del Gobierno, dijo Rufián, es “valentía y diálogo” para evitar cosas como el informe de Amnistía Internacional que “habla de la salvajada que supone tener a Jordi Sánchez y a Jordi Cuixart en la cárcel”, y que no solo interpela al Tribunal Supremo sino a la Fiscalía y a la Abogacía del Estado. “¿Les interpela a ustedes?”, preguntó, dirigiéndose expresamente al PSOE y a Unidas Podemos.

Sánchez reiteró que en múltiples intervenciones ha reafirmado su intención de “reactivar la comisión bilateral de diálogo”, y dijo a Rufián que no entiende su acusación de hacer matemáticas en vez de política cuando, por ejemplo, se han extendido los Ertes para materializar el compromiso de que “nadie quede atrás”, y se está dando una respuesta a la crisis “completamente distinta de la que daría la derecha”.

El presidente defendió su “política progresista” y reafirmó su intención de “mantener los compromisos de investidura”, agradeciendo la actitud constructiva de ERC.