Por otra parte, durante su comparecencia en el Senado, reconoció la dificultad de impedir a los jóvenes que rompan con esa orden de distancia mínima. "¿Quién va a controlar que millón y medio de estudiantes no se abracen?", cuestionó, tras bromear en sede parlamentaria pidiendo a los universitarios "abrazarse moderadamente".

El ministro también pidió a las Universidades que, en sintonía con las medidas sanitarias, que "en lo que pueda ser presencial, que no cambien nada".

En este punto, dijo que su "fórmula preferida" sería una modalidad híbrica, combinando la videoconferencia y la presencialidad de una parte del alumnado. "Es una sugerencia", recalcó.

De cara al curso 2020-2021, Universidades recomienda a todas las universidades españoles una "presencialad adaptada". Así, se deberán amoldar las clases presenciales manteniendo 1,5 metros de distancia entre el alumnado, y en caso de que no sea posible para que estén en el mismo aula todos los alumnos, se podra optr por actividad presencial con los estudiantes con los que se cumpla dicha distancia "y la retransmisión por videoconfrencia para el resto", solución que se dará "de forma rotatoria".

En cuanto a las prácticas presenciales, Castells indicó que "hay que hcerlas presenciales, pero con el metro y medio" y otras medidas que están aplicando las empresas con sus trabajadores. "Sentido común y disciplina", apeló.

No obstante, el ministro reconoció que "nadie nos garantiza que no haya rebrote", por lo que todas esas recomendaciones para el próximo curso podrían verse modificadas en los próximos meses.