Mediante ambas versiones de la guía “se permite una mayor autonomía e integración de las personas con discapacidad en la sociedad y en concreto en el ámbito jurídico y el mercado inmobiliario, puesto que se le dan las bases y la información necesaria para poder acceder al Registro de la Propiedad y a su contenido”, explicaron desde el Colegio de Registradores en un comunicado.

Con ella, se permite a su vez un conocimiento de las ventajas de la inscripción registral, la protección jurídica que genera tener sus derechos inscritos, y toda la información y contenido al que pueden acceder a través de la publicidad registral, “dotando a sus destinatarios de una mayor autonomía y un mejor conocimiento de sus derechos”, indicaron desde la entidad.

Los documentos en lectura fácil pueden beneficiar a la población general, aunque se dirigen de manera concreta a personas con dificultades de comprensión lectora, derivadas de la discapacidad intelectual, trastorno mental, trastornos específicos del lenguaje, daño cerebral sobrevenido, dificultades de aprendizaje de la lectura, trastorno del espectro autista o trastorno por déficit de atención con o sin hiperactividad, entre otras.

Por otro lado, con la guía de publicidad registral en Braille se pretende que las personas ciegas tengan un texto transcrito a esta lengua en el que de una manera concreta se explique de manera práctica las posibilidades de información que ofrece el Registro de la Propiedad y la protección completa de los derechos que implica su inscripción en el Registro.