“Creemos que los representantes de los españoles debemos ponernos de acuerdo para seguir trabajando en la Cámara Baja durante las próximas semanas, tanto en la tarea legislativa como en la del control al Gobierno. En particular, vemos imprescindible celebrar un Pleno extraordinario para que el presidente del Gobierno explique qué está haciendo para combatir los rebrotes de coronavirus que proliferan por España, cómo piensa coordinarse con las comunidades autónomas o qué pasos va a dar para la adquisición del material sanitario necesario para seguir haciendo frente a la pandemia”, explica Bal.

También sugiere que “hay que debatir sobre sus previsiones para los próximos meses y las medidas de reactivación económica imprescindibles para ayudar a las familias españolas en un momento tan difícil”.

“Desde Ciudadanos consideramos que la crisis que vive nuestro país como consecuencia de la pandemia nos obliga a habilitar el mes de agosto en el Congreso y seguir trabajando para todos los españoles. El virus no se va a ir de vacaciones. Las consecuencias del deterioro económico, tampoco. Millones de familias no pueden este año ni pensar en esa posibilidad. Los políticos no debemos permanecer ajenos a esa situación”, argumenta.

Bal subraya que ya se ha conseguido mantener la actividad parlamentaria en julio, a pesar de que tampoco es mes hábil en el Congreso de los Diputados, y gracias a ello se ha mantenido el control al Gobierno, han concluido los trabajos en la comisión de reconstrucción y se ha celebrado “un Pleno importantísimo sobre el acuerdo europeo para los fondos de reconstrucción”.

“Eso mismo debemos hacer en agosto. Hay mucho trabajo por delante, grandes problemas contra los que luchar, innumerables medidas que acordar y un horizonte lleno de incertidumbre ante el que prepararnos como país”, asegura Bal.

Dado que el Reglamento del Congreso exige que las convocatorias de sesiones extraordinarias sean solicitadas por el Gobierno, la Diputación Permanente o la mayoría absoluta de los diputados, Bal reconoce que la posición de los grupos parlamentarios es determinante para que la propuesta de Ciudadanos, que sólo tiene diez diputados, se pueda materializar.