Coronavirus

Amnistía denuncia que muchos países mantienen encarcelados a los activistas mientras liberan a otros presos

MADRID
SERVIMEDIA

Amnistía Internacional denunció este jueves cómo distintos gobiernos que presumían de haber puesto en libertad a cientos de presos en respuesta a los brotes de Covid-19 excluyeron a los defensores de los derechos humanos de estas medidas, al tiempo que seguían practicando detenciones de activistas, periodistas y personas críticas.

En un nuevo informe publicado hoy, Amnistía documenta ataques contra defensores y defensoras de los derechos humanos cometidos durante la crisis del Covid-19, y pone de manifiesto "la hipocresía de los gobiernos" que, como en el caso de Egipto, India, Irán y Turquía, han dejado a presos de conciencia consumirse en condiciones atroces al tiempo que publicitaban ampliamente los programas de excarcelación.

Bajo el título 'Atreverse a defender los derechos humanos durante una pandemia', el trabajo describe cárceles con focos de Covid-19 llenas de activistas.

Según Lisa Maracani, investigadora de Amnistía Internacional sobre defensores de derechos humanos, "el coronavirus ha sido un castigo añadido para estas personas, injustamente encarceladas y también se ha utilizado como pretexto para cometer nuevos actos de hostigamiento, persecución e incluso homicidio”. “La exclusión de estos activistas de las medidas de libertad subraya el carácter político de su encarcelamiento", declaró.

Así, citó el caso de Turquía, donde periodistas, profesionales de la abogacía, activistas y opositores políticos "en espera de juicio y detenidos por cargos infundados continúan entre rejas pese a las medidas del Gobierno", en virtud de las cuales más de 100.000 personas quedaron en libertad en abril. En su opinión, "es evidente que el Gobierno turco le teme a la crítica aún más que a la pandemia”.

El nuevo informe documenta ataques contra defensores y defensoras de los derechos humanos perpetrados durante el periodo de Covid-19 en 46 países, y muestra cómo la legislación sobre “noticias falsas”, las restricciones de la circulación, la menor protección policial y la mayor intolerancia a la crítica han dado lugar a una nueva oleada de represión en todo el mundo contra quienes denunciaron irregularidades en el sector sanitario o "respuestas inadecuadas a la pandemia".

Según Maracani, “ahora que una gran parte de Europa ha superado el pico de coronavirus, es vital que la comunidad internacional no dé la espalda a las situaciones terribles que se viven en países en los que el número de infectados está aumentando”. Además, pidió recurrir a la cooperación internacional para que dichos gobiernos pongan en libertad a las personas que están en prisión por "el mero hecho" de ejercer de forma pacífica sus derechos y que "ahora corren grave peligro de contraer el coronavirus”.

BLANCO FÁCIL

Por otro lado, Amnistía Internacional advirtió de que las medidas de confinamiento que restringen la circulación han puesto en peligro a muchos activistas, al convertirlos en blanco fácil de quienes quieren silenciarlos. En Colombia y México, por ejemplo, se han reducido las medidas de protección policial.

“Ahora más que nunca, el trabajo de los defensores y defensoras de los derechos humanos resulta vital para luchar por la igualdad en el acceso a atención médica, alimentos y alojamiento", subrayó, y también para informar a la ciudadanía sobre el virus y las formas de protegerse. "Aquellos gobiernos que explotan esta crisis para atacar a quienes defienden los derechos humanos deben saber que se les está vigilando de cerca”, concluyó Lisa Maracani.

(SERVIMEDIA)
06 Ago 2020
AGQ/mjg