El galardón, de carácter anual y que se dio a conocer durante el congreso anual de ISEE, reconoce las “contribuciones sostenidas y excelentes al conocimiento y a la práctica de la epidemiología ambiental” y se otorga a profesionales que hayan “contribuido de manera substantiva e innovadora y durante muchos años a los métodos y a la práctica” de esta disciplina científica.

Manolis Kogevinas cuenta con una larga y dilatada carrera en epidemiología ambiental. Entre sus méritos, se puede encontrar la publicación de más de 600 artículos en en revistas científicas, muchos citados más de 50.000 veces. Ha dirigido 15 tesis doctorales. Además, ha sido codirector del Centro de Investigación en Epidemiología Ambiental (Creal), trabajó en la Agencia Internacional de Investigación sobre el Cáncer (Iarc/OMS) y es asesor en varios comités de expertos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y en otros comités científicos europeos.

En los últimos años, ha centrado su investigación en la salud ocupacional y los efectos de la disrupción circadiana en la salud y también en la evaluación y control de los efectos de los contaminantes químicos en el agua potable, realizando grandes estudios epidemiológicos internacionales.

Kogevinas calificó de "gran honor" recibir este premio porque, además de ser “la distinción más importante que existe en el mundo de la salud ambiental”, especialmente en este momento con la pandemia por la Covid-19, “es una manera de reconocer el vínculo esencial entre la investigación y las políticas de prevención”.