Lo dijo en una rueda de prensa conjunta con la ministra de Defensa, Margarita Robles, celebrada en el Palacio de la Moncloa para referirse a la intención de la ANC de mantener la manifestación prevista para el 11 de septiembre con motivo del Día de Cataluña porque tendrá “estrictas medidas de seguridad” y porque no se puede “renunciar derechos fundamentales”.

Illa dejó claro que diría a los responsables de la ANC “lo mismo que a cualquier ciudadano”: que el derecho a la manifestación es un “derecho fundamental”. No obstante, recordó que la “situación epidemiológica” de España obliga a ser cuidadoso.

Por ello, apeló al “sentido común” de la ANC y le recordó que se deben respetar las recomendaciones sanitarias “en cualquier situación”.

La ANC ha convocado una serie de movilizaciones con motivo de la Diada. Por el momento, tiene confirmados 90 puntos de concentración en 62 municipios catalanes, una cifra que este colectivo está dispuesto a evitar con el fin de evitar que se acumulen concentraciones en determinadas capitales de comarca.

La ANC ha concebido una manifestación “descentralizada” en varios lugares de Cataluña alrededor de edificios de titularidad estatal, estaciones de tren y juzgados con las que pretende trasladar a la opinión pública que la independencia es el único instrumento útil para salir de la crisis actual.