El informe, que compara los hábitos de consumo de los italianos, franceses y españoles, señala que en nuestro país todavía hay un 27 por ciento de la población que no posee automóvil.

Otro de los aspectos que analiza el estudio son lo hábitos de lectura en estos tres países. Así, mientras el 68 por ciento de los franceses compra libros, en Italia el porcentaje desciende hasta el 42 por ciento y en España hasta el 36 por ciento.

Los tres países son grandes consumidores de televisión (el 97 por ciento de los españoles, italianos y franceses encuestados), pero son los españoles los que están a la cabeza en el uso del vídeo (33,2 por ciento de los consultados).

En cuanto a la forma de vestir, los franceses y españoles escogen su estuario pensando más en la duración (44 y 43 por ciento, respectivamente), mientras los italianos prefieren fijarse en la calidad, ya que muchos de ellos opinan que el vestido sirve para mejorar su estimación social y es un reflejo de la personalidad.

Son los italianos los que compran más artículos de perfumería (un 48 por ciento), frente al 32 por ciento de los españoles y el 27 por ciento de los franceses.

Los italianos también destacan en la importancia que dan a la buena forma física. El 15 or ciento de los habitantes de este país la consideran muy importante, frente al 9 por ciento de los españoles y el 8 por ciento de los franceses.

También hay diferencias en cuanto a los lugares de compra que prefieren los ciudadanos de estos países. Mientras los franceses tienen más arraigada la costumbre de acudir a los grandes almacenes, un elevado número de españoles prefiere hacer la compra diaria en las tiendas de barrio.

El estudio del instituto de estadística italiano Censis concluye afirando que existe un importante acercamiento en los hábitos de consumo de franceses, italianos y españoles, especialmente en la demanda de calidad.