Lo dijo en rueda de prensa en el Congreso tras reunirse en Moncloa con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y después de que Torra haya remodelado su gabinete.

Rufián cree que esa remodelación es una traslación de “las peleas internas” en lo que antes era Convergència y ahora es PDECat o Junts per Catalunya, y se mostró convencido de que a los catalanes “les gusta mucho más” ver a los consejeros de ERC tomando medidas en sus respectivas consejerías que “los líos que tenga cada cual dentro de su partido”. Además, le parece “curioso que se purga a según quién por el control de un partido, y no por un caso de corrupción como el tres por ciento”.

En su opinión, hay una “pugna” dentro del independentismo entre los pragmáticos que, defendiendo la independencia, quieren “gobernar mientras tanto”, y quienes solo aspiran a hacer “magia”. “Hay poco margen para la magia”, alertó.

Rufián negó con contundencia, “absolutamente falso”, que Torra haya ofrecido al vicepresidente de la Generalitat, Pere Aragonés, posibles relevos de consejeros de su partido. Hay tres consejeros, los de Salud, Educación y Trabajo, dijo Rufián, “que se están dejando literalmente la piel por sacar a Cataluña adelante” frente a los efectos de la pandemia, y “se equivoca quien pretenda trasladar a ERC las guerras cainitas de Convergència”.