Así lo pusieron de manifiesto la subdirectora de Relaciones Internacionales y Sostenibilidad de Correos, Elena Fernández; la directora general de la Fundación Seres, Ana Sainz; el director ejecutivo de Ecodes, Víctor Viñuales; y la fundadora y CEO de la empresa 3A4B, Isabel Garro, durante un diálogo online organizado por la agencia de noticias Servimedia bajo el título ‘Los retos de la sostenibilidad’.

Desde Correos, Fernández puso el acento en que en Europa “no van a entender que no nos pongamos de acuerdo” para invertir hasta 140.000 millones de euros en ayudas a los que puede acceder España del fondo de reconstrucción comunitario “con las necesidades que tenemos”. Por eso, fue clara al decir que “no van a aceptar excusas” y “tampoco tenemos que aceptarlas nosotros”.

Destacó que la Unión Europea ha puesto el foco en la digitalización y la sostenibilidad y expuso que Correos ya se comprometió hace más de 10 años a reducir sus emisiones y a ser neutral en carbón en 2030. Para ello, está transformando su flota de vehículos hacia los eléctricos y también está reduciendo las emisiones en sus 6.000 edificios.

Además, en Correos consideran que es posible que en el futuro se pueda compartir la carga de envíos entre operadores para facilitar que lleguen a su destino a través de vehículos de bajas emisiones.

Por parte de Ecodes, Viñuales agregó la importancia de la edificación y la vivienda, el transporte o la agricultura y ganadería, sector éste último que “debe formar parte de la solución porque no sería bueno que se abrieran brechas entre lo urbano y lo rural”. A su juicio, se deben potenciar los sectores estratégicos.

Viñuales consideró que el reto que se plantea es “dar una salida convergente a la vez” a la crisis climática, sanitaria, económica y social y esos fondos europeos sitúan a España “ante una oportunidad única”. Si se pierde la “oportunidad” de aprovecharlos, “perdemos todos”, aseguró. “Tenemos que ponernos en estado de emergencia todos, administraciones, empresas, sociedad civil”, destacó para pedir que las inversiones que se planteen beneficien a las generaciones futuras por ser las que tendrán que pagar la deuda asociada a esta crisis.

LAS PERSONAS EN EL CENTRO

Desde la Fundación Seres, Sáinz consideró que “da igual el sector, pero pongamos en el centro a las personas” y advirtió de que, aunque los 140.000 millones puedan parecer una cantidad elevada, “si no hacemos que tengan multiplicación” no se lograrán solucionar las “debilidades" del país diagnosticadas. Abogó por “repensar” el rol que tiene cada empresa y cómo puede transformarse para aportar y llamó a “unirnos y colaborar para salir adelante”.

En esta misma línea se pronunció la empresaria Isabel Garro, quien pidió dejar de “pelearnos en enfrentamientos que no llegan a ninguna parte” más que a la “desesperanza” de la ciudadanía y pasar a la acción. Indicó que el plazo para invertir el dinero europeo que se transfiera a España es de tres años, lo que pone de relieve la importancia de la coordinación entre todos los agentes de la sociedad.