Cultura

La pandemia y la polarización política marcan la actualización del diccionario de la RAE

- Incluye ‘coronavirus’ junto a otros términos de la pandemia y añade ‘fascistoide’, ‘parafascista’ o ‘izquierdoso’

MADRID
SERVIMEDIA

La Real Academia Española (RAE) presentó este martes una nueva actualización del diccionario marcada por la pandemia del coronavirus, la polarización política y el lenguaje en las redes sociales. De esta manera, incluye nuevos términos como ‘coronavirus’, ‘desescalada’, ‘fascistoide’, ‘parafascista’, ‘izquierdoso’, ‘emoji’ o ‘trol’.

La pandemia del coronavirus y la polarización política que vive España han tenido su traslación en los nuevos términos del Diccionario de la Lengua Española (DLE), que incorpora en su actualización 23.4, presentada este martes por la académica Paz Battaner, un total de 2.557 novedades, entre ellas más de 1.200 nuevos términos que aparecen por primera vez.

Es el caso de ‘fascistoide’, que se define como un adjetivo despectivo para señalar a quien “tiende al fascismo o al autoritarismo”, o ‘parafascista’, que es -según la RAE- aquello “que tiene semejanza con el fascismo o con lo fascista”.

También entra en el diccionario ‘izquierdizar’, que hace referencia a que “alguien o algo pase a tener posturas ideológicas de izquierdas o que tienda a ellas” o “adoptar posturas ideológicas de izquierdas”. Asimismo, se enmienda la acepción de ‘izquierdoso’ para señalar en política a algo “cercano a las posiciones de la izquierda” en tono despectivo.

Sin embargo, lo que más acepciones nuevas ha traído es la pandemia del coronavirus. La RAE añade así ‘coronavirus’, que define como “virus que produce diversas enfermedades respiratorias en los seres humanos, desde el catarro a la neumonía o la Covid”, así como el propio término ‘Covid’, un “síndrome respiratorio agudo producido por un coronavirus”.

Además, se añade ‘confinamiento’ (“aislamiento temporal y generalmente impuesto de una población, una persona o un grupo por razones de salud o de seguridad”) y se enmienda la acepción de ‘confinar’, que queda descrita como “encerrar o recluir algo o a alguien en un lugar determinado o dentro de unos límites”.

La pandemia también ha provocado que se modifique una de las acepciones de la palabra ‘mascarilla’, que se define ahora como “máscara que cubre la boca y la nariz de su portador para protegerlo de la inhalación y evitar la exhalación de posibles agentes patógenos, tóxicos o nocivos”.

En esta lista de nuevos términos marcados por el coronavirus se incluye ‘desescalada’, una nueva palabra en el diccionario recogida como “descenso o disminución graduales en la extensión, intensidad o magnitud de una situación crítica, o de las medidas para combatirla”. No obstante, también es la “reducción progresiva de las operaciones militares en un conflicto bélico”.

TROLES Y CALZONCILLOS BOXER

La polarización política y las redes sociales, por su parte, han traído términos de nuevo cuño como ‘trol’, que se define como “en foros de Internet y redes sociales, usuario que publica mensajes provocativos, ofensivos o fuera de lugar con el fin de molestar, llamar la atención o boicotear la conversación”.

En este sentido, también se añade ‘trolear’, que es lo que hacen los troles o la acción de “burlarse de alguien gastándole una broma, generalmente pesada”.

No obstante, no todo es pandemia, redes sociales y polarización política. La RAE también ha aprovechado la actualización para dar cabida a la gastronomía. Como signo de modernidad, el diccionario recoge ‘gastrobar’, muy populares últimamente y que define como “bar o restaurante que ofrece tapas y raciones de alta cocina”.

Incluye también ‘faláfel’ como “plato típico de la cocina árabe y del Oriente Medio, consistente en bolas fritas de pasta de garbanzos u otras legumbres aliñada con cebolla, ajo, cilantro o perejil y especias” o ‘nacho’ como “trozo triangular de tortilla de maíz, típico de la cocina mexicana, que, frito, se toma como aperitivo, generalmente acompañado de salsas espesas”.

De hecho, los guiños a México van más allá y añade ‘tex-mex’ para señalar a lo “perteneciente o relativo a las costumbres de los mexicanos y de los estadounidenses de Texas”, y que “se aplica especialmente a la música y la gastronomía”. Además, incluye ‘tayín’ como “recipiente compuesto de una cazuela y de una tapa cónica en el que se cocina el tayín”.

En la gastronomía menos elaborada, la RAE también da por bueno “sánguche” para referirse a ‘sándwich’, pues se usa mucho en Argentina, Costa Rica, Nicaragua, Perú, Uruguay o Venezuela.

Entre todas estas nuevas palabras recogidas en el diccionario de la RAE también se puede destacar que, al fin, se recoge ‘boxer’ para denominar a un “calzoncillo parecido a un pantalón corto’, pues antes sólo hacía referencia a los miembros de la sociedad secreta china que en 1.900 se sublevó contra la intromisión extranjera en China.

DISCAPACIDAD

Asimismo, la Real Academia Española ha enmendado la acepción del término ‘discapacidad’ en el Diccionario de la Lengua Española, que pasa a ser definida como “situación de la persona que por sus condiciones físicas o mentales duraderas se enfrenta con notables barreras de acceso a su participación social”.

La RAE destierra la palabra ‘disminuido’, que la sustituye por ‘discapacitado’, término que define como “que posee una discapacidad”. Esto, sin embargo, no coincide con lo defendido por el Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (Cermi), que apostó por que el diccionario recogiera “persona con discapacidad” y no “discapacitado”.

Ya en diciembre de 2018, el Consejo de Ministros aprobó un anteproyecto de ley de reforma del artículo 49 de la Constitución Española para eliminar el término 'disminuidos' y sustituirlo por 'personas con discapacidad', tal y como el movimiento asociativo de la discapacidad reclama desde hace años.

(SERVIMEDIA)
24 Nov 2020
GIC/mjg