De este modo, la plataforma digital ha puesto a disposición del cliente final alimentos que hasta ahora sólo llegaban a la restauración y a los mismos precios que disfrutaba la hostelería, de manera que el género tiene salida, los empleados de las empresas de alimentación tienen trabajo y las compañías, “futuro”, según precisaron sus responsables.

Los pedidos se realizan de martes a viernes con el fin de que, en apenas 24 horas, el producto llegue al consumidor directamente procedente de la lonja o de la huerta y muchos de sus clientes ya hacen la compra a través de esta plataforma “de manera habitual”, según sus impulsores.

“Los productos que distribuían las empresas que sirven a los restaurantes y hoteles son de primera calidad, pero durante el confinamiento no podían darle salida”, insistió Rodríguez, quien defendió que este proyecto permite llevar al cliente final todo este género.

Así, su iniciativa, que surgió para “ayudar” a familiares y amigos que trabajaban en este sector, se ha convertido en una plataforma “pionera” en España para la adquisición de productos frescos desde un mismo sitio y a unos precios que, hasta ahora, eran “inaccesibles” para el consumidor final, según puntualizó Gómez de Figueroa, para, a continuación, advertir de que este proyecto “ha llegado para quedarse”.