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Díaz insta a las empresas a “corresponsabilizarse” con los cuidados y flexibilizar la gestión del tiempo para no dejar “aparcadas” a las mujeres

MADRID
SERVIMEDIA

La ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, conminó este miércoles a las empresas a “estar comprometidas con el cuidado” a “integrarlo en su funcionamiento”, convencida de que las compañías “necesitan flexibilidad en la gestión del tiempo de trabajo” porque la demanda “es cada vez más diversa”, sin caer en la tentación de abrir “cariles lentos” para dejar “aparcadas” a las madres y, en general, a las mujeres.

“También es evidente que el derecho a la vida personal, a la salud, a la promoción profesional y el cuidado, son a la vez garantía de calidad de la propia empresa y una ineludible e importante obligación para la misma”, agregó durante el ‘Forbes Summit’ 2021 organizado por Forbes junto a Grant Thorton, donde realizó una férrea defensa en favor de un liderazgo femenino asegurando que hace también más rentables a las empresas.

“El liderazgo femenino solo adquiere pleno sentido si forma parte de la opción vital y profesional de las personas, sin implicar renuncias y sin exponerlas a conceptos personales irresolubles, al menos, no más que los conflictos que afrontar los hombres”, argumentó.

En esta línea fue donde indicó que “la corresponsabilidad no debe ser o darse sólo entre hombre y mujer, sino que también la corresponsabilidad tiene una dimensión empresarial porque las empresas deben estar comprometidas con el cuidado”.

En su opinión, la gestión del tiempo va a ser “uno de los temas fundamentales del mundo del trabajo en los próximos años”, ya que la forma en la que concebimos dicho tiempo “tiene repercusión en los derechos fundamentales, particularmente con derecho a la igualdad y el derecho a la intimidad”, pero también porque “tiene relación directa con la salud”.

Al respecto, indicó que no solo afecta por el cansancio y por el mayor número de accidentes laborales que puedan derivarse de “las largas jornadas laborales”, “sino también porque la conexión permanente incrementa el estrés laboral y los riesgos psicosociales”, y cada vez más, hombres y mujeres”, “demandamos tiempo personal y tiempo para el cuidado”. “No se trata de abrir carriles lentos en las empresas en las que queden aparcadas las madres y las mujeres en general”, apremió.

Díaz defendió que “la fuerza mayor” debe ser atendida en la doble dirección: “tanto cuando hay un pedido extraordinario como cuando un niño o una niña se levanta, como pasa muchas veces”.

A su juicio, el liderazgo femenino resultará “fundamental en la instauración de estas nuevas dinámicas sobre el tiempo de trabajo”, a fin de garantizar que no “estigmatizan a las personas cuidadoras y que tampoco promuevan dinámicas confrontadas entre quienes cuidan y quienes no cuidan”. “Requiere una nueva forma de entender el liderazgo empresarial, tanto de hombres como de mujeres, pero, que en las mujeres, sin duda, tenemos mucho que aportar”, agregó.

Durante su intervención defendió que las estrategias de gestión empresariales deben “ser justas, igualitarias, responsables y eficientes”. En el caso de la igualdad efectiva entre hombres y mujeres explicó que lo “reclama” la sociedad y resulta “indiscutible que la participación de las mujeres en los lugares de toma de decisión de todo tipo empresariales, políticas y sociales es rentable”.

Según Díaz, la participación “activa” de las mujeres en los órganos directivos es “rentable” porque “refleja la capacidad de las empresas de reconocer el mérito de las personas allí donde se encuentran”, demuestra que “son respetuosos con la diversidad” y “son empresas que reconocen la excelencia”, con “la voluntad de que ese mérito trabaje en su propio beneficio, sin prejuicios y estereotipos”.

Además, indicó que el compromiso con la igualdad entre hombres y mujeres en las empresas particularmente, pero no solo en los niveles directivos, “incrementa la confianza de las personas trabajadoras y su compromiso con un proyecto empresarial” y “engarza directamente con su responsabilidad social”.

“Este compromiso social en este momento es más importante que nunca porque, tras la pandemia, estamos todos y todas a la expectativa de una nueva sociedad que habla en términos de corresponsabilidad, que quiere dejar atrás el techo de cristal, que es cada vez más consciente de que debe valorarse correctamente el trabajo realizado por las personas, sean hombres o sean mujeres”, agregó.

En línea con esta convicción indicó que el Gobierno está decidido a favorecer la igualdad y también la Unión Europea, como lo demuestran las diferentes normativas adoptadas a escala nacional y comunitaria para impulsarlo. De forma específica recordó, por ejemplo, que hace algo más de un año se aprobó la directiva de Conciliación de Responsabilidades y “previsiblemente se iniciará en breve la tramitación de la Directiva de Transparencia Retributiva, una norma que será fundamental para la adecuada valoración del trabajo de las mujeres”.

La ministra recordó que también se intentó una normativa para fijación de cuotas a escala europea que no prosperó, pero no descartó que vuelva a retomarse. A escala nacional indicó que permea, de forma transversal, a todos los ministerios en las medidas que adoptan y tienen en consideración la condición de género. “Desde los poderes públicos tenemos la obligación de establecer los medios necesarios para facilitar la actuación de las empresas comprometidas con la igualdad y generalizar este compromiso”, resumió.

(SERVIMEDIA)
21 Ene 2021
ECR/gja