La tasa de morosidad se mantiene en mínimos desde abril de 2009 y es inferior al 5% que se registró en noviembre de 2019.

El cómputo total de los créditos considerados dudosos -con, al menos, tres cuotas consecutivas sin pagar- se situó en 56.142 millones, por encima de los 55.756 millones que alcanzaba el mes previo. Esta cifra supone un ligero aumento del 0,7%, que se traduce en 386 millones.

En comparativa anual, los dudosos se redujeron en un 6,8%, a pesar de la crisis derivada del Covid-19. El Gobierno ha puesto en marcha medidas para enfrentarla como los avales del ICO.

El saldo financiado se situó en noviembre próximo a los 1,23 billones de euros, con un incremento del 2% interanual y del 0,7% frente a octubre.

Por tipo de entidades, en la banca la morosidad fue del 4,5%, mismo nivel del mes anterior, e inferior al registrado hace un año (4,99%). Los dudosos contabilizaron 52.845 millones sobre un total de 1,176 billones.

Para los establecimientos financieros, la morosidad se situó en el 6,64% en noviembre, ligeramente superior a la de octubre (6,62%) y muy por encima del 5,34% anotado en noviembre de 2019.

En este caso, los dudosos sumaron 3.042 millones sobre un total de 45.825 millones.