La predicción de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), recogida por Servimedia, indica que Canarias y Extremadura son las únicas comunidades autónomas que se librarán del tiempo adverso. El viento volverá a ser el fenómeno más extendido, esta vez en buena parte del cuadrante noroeste y el interior oriental peninsular, mientras que todo el litoral peninsular y balear está con avisos salvo el de Cádiz y Huelva.

Con el aviso naranja -riesgo importante para actividades al aire libre- por rachas de 90 a 100 km/h hay zonas de Albacete (Alcaraz y Segura), Almería (Valle del Almanzora, Los Vélez, Poniente y capital), Murcia (noroeste) y Valencia (interior).

El resto de los avisos por viento son amarillos -riesgo, el más bajo en la escala de niveles- y afectan a áreas de A Coruña, Álava, Asturias, Ávila, Baleares, Burgos, Cantabria, Castellón, Cuenca, Granada, Guadalajara, Jaén, La Rioja, León, Lugo, Madrid, Ourense, Palencia, Pontevedra, Salamanca, Segovia, Soria, Teruel, Valladolid, Zamora y Zaragoza.

"No se prevé, en general, rachas tan intensas como con Hortense, pero, de nuevo, en amplias zonas del norte, el centro y el este peninsular, y también en Baleares, volverán a superarse los 80 o los 100 kilómetros por hora de racha máxima", apuntó Rubén del Campo, portavoz de la Aemet.

TEMPORAL MARÍTIMO

Como es habitual, el viento traerá asociado un temporal marítimo, esta vez con olas de cuatro a cinco metros en el Atlántico gallego y el Cantábrico, y de tres a cuatro metros en el Mediterráneo peninsular y Baleares, si bien en el archipiélago podrían darse olas individuales incluso de hasta siete metros. Todo el litoral peninsular y balear, excepto el gaditano y el onubense, está bajo avisos amarillos por fenómenos costeros.

Meteorología ha activado el aviso amarillo por deshielo en Burgos (norte y Cordillera Cantábrica) y Navarra (Pirineo), por nevadas en las zonas altas de Huesca, León, Lleida y Navarra, y por lluvias fuertes en Pontevedra.

El frente asociado a Ignacio traerá también lluvias a la península, que irán avanzando de oeste a este a lo largo del día. "No serán grandes cantidades de precipitación, salvo en Galicia. De hecho, en el sur de esta comunidad podrían ser fuertes o persistentes. También lloverá con cierta intensidad en el oeste de la Cordillera Cantábrica y en puntos de los Pirineos", apostilló Del Campo.

La cota de nieve se situará entre 800 y 1.000 metros en el norte, para subir a lo largo del día a entre 1.800 y 2.000 metros hacia el mediodía y bajar después hasta unos 1.500 metros.

Las temperaturas apenas variarán este sábado. Si acaso, bajarán en la mitad oriental peninsular y Baleares, y subirán por el noroeste de la península. Habrá heladas nocturnas en zonas montañosas.