En una entrevista en TVE recogida por Servimedia, aseguró que no hay “ningún riesgo” en la decisión de impugnar, porque se ha hecho a la vista de fundamentos jurídicos y serán los tribunales los que decidan.

“El Gobierno ha hecho lo que tenía que hacer” ante la evidencia de que la coalición era una especie de “tapadera” con la que Batasuna pretendía “sortear” la prohibición de inscribirse como Sortu.

Sin embargo, Jáuregui explicó que comparte la reflexión del lehendakari, Patxi López, en el sentido de que las otras dos formaciones no merecen tacha alguna de ilegalidad.

Quiere pensar, añadió, que la decisión de conformar esa coalición obedecía al deseo de “facilitar el aterrizaje” de la izquierda abertzale, bajo la convicción de que era algo “favorable para la paz”.

El problema es que la violencia sigue porque ETA no se ha disuelto y la izquierda abertzale no ha roto con la banda de forma fehaciente, insistió.

Jáuregui negó que la decisión de impugnar todas las listas se haya tomado por la presión del PP, y atribuyó a los dirigentes de ese partido que así lo afirman un “ejercicio bastante sectario de protagonismo”.

Denunció, en ese sentido, que el PP “no ha jugado limpio” en esa materia porque la actuación del Gobierno “no merece ninguna sospecha”.