En una entrevista en la agencia de noticias Servimedia, Gómez destacó que hay que “fortalecer los instrumentos de representación de las personas con discapacidad, como la Fundación ONCE y el Cermi, que son elementos clave de la política española en materia de discapacidad".

"Ahí es donde somos fuertes. Somos fuertes porque tenemos unas estupendas instituciones de apoyo. Somos débiles porque las empresas todavía no contratan en volumen suficiente a trabajadores discapacitados”, dijo.

“El sector de la discapacidad y el de la economía social ha creado empleo. Da la impresión de que estos sectores han tenido una mayor capacidad de resistencia ante la crisis. El futuro tiene que ser, por una parte, adaptar los mecanismos de estímulos y ayudas a las empresas para la contratación de personas con discapacidad. También se tienen que fortalecer los centros especiales de empleo, con una política que ayude a las empresas a cumplir con el porcentaje de trabajadores discapacitados, algo que todavía no se cumple con la suficiente intensidad”, agregó.

Recordó el titular de Trabajo e Inmigración que “los gobiernos de José Luis Rodríguez Zapatero, desde 2004 han sido gobiernos que han hecho políticas intensas para el sector de la discapacidad y siempre contando específicamente con los órganos de los representantes de los discapacitados. Han sido políticas consensuadas, pactadas llevadas a cabo con la misma intensidad que lo hemos hecho con los interlocutores sociales”.

"El empleo para las personas con discapacidad tiene que ser una inserción normal en el ámbito de las empresas. Ahora tenemos instrumentos razonables para el empleo con apoyo, y pensamos que el futuro tiene que pasar porque las empresas tengan un núcleo importante de trabajadores con discapacidad. Más que discapacidad de los trabajadores nos encontramos con discapacidad de las empresas para insertarlos”, concluyó.