Así lo pidieron frente a la Puerta de los Leones del Congreso de los Diputados representantes de entidades como Plataforma per la Llengua, Òmnium Cultural, Kontseilua, A Mesa pola normalización lingüística, Nogara, Ciemen, Iniciativa pol asturianu, Acció cultural del País Valencià.

Estas entidades lanzaron estas reclamaciones tras hacerse una fotografía con diputados de partidos políticos que apoyan la proposición no de ley “sobre la realidad plurilingüe e igualdad lingüística” que se debatirá esta tarde en el Pleno de la Cámara Baja.

Desde A Mesa pola normalización lingüística, se recalcó que piden “algo muy elemental” y es que “cualquier comunidad lingüística, hable la lengua que hable, tiene derecho a usar su lengua” porque “todas las pluralidades lingüísticas son exactamente iguales”. “Si hay algo que desterrar no es la diversidad lingüística, es el racismo en todas sus formas, incluido el racismo lingüístico”, indicó su representante, Marcos Maceira.

En nombre de Kontseilua, Paul Bilbao aseguró que este debate trata sobre “la democracia, la pluralidad y la igualdad”, parámetros en los que dijo que debe basarse “la gestión de la diversidad lingüística” porque “no somos ciudadanos de segunda clase y exigimos un trato igualitario”.

Por su parte, Acció cultural del País Valencià instó al Gobierno a iniciar todas las acciones “para que las lenguas propias distintas del castellano gocen de los mismos derechos y deberes que se reconocen al castellano” para lograr “la igualdad real y efectiva” y poner “fin a la discriminación de la que son víctimas todos los ciudadanos del Estado que son hablantes de las lenguas vasca, gallega, catalana, asturiana y aragonesa”.

En esta línea, desde Ciemen exigieron que asuma la “realidad plurilingüe del Estado español”, garantizando que la Administración General del Estado “utilice indistintamente cualquiera de las lenguas que tienen que ser reconocidas y que funcione en distintas lenguas independientemente de su ubicación física”, y mentó las Cortes Generales, los tribunales y otras instituciones.

La Plataforma per la Llengua sostuvo que es “importantísimo que los diferentes medios de las diferentes lenguas puedan verse y consumirse”, además de exigir “respeto real” basado “en los derechos y deberes y actuación comprometida de todos los poderes del Estado”.

En su caso, Iniciativa pol asturianu habló de las “dificultades” existentes para “escoger la asignatura de asturiano libremente en los colegios, registrar una empresa o simplemente poner una esquela”, por lo que pidió abrir una reforma del Estatuto “y nos permita reconocer la oficialidad del asturiano”.