Se trata de un proyecto que puso en marcha en el año 2017, cuando planeó la necesidad de formular un plan de gestión de residuos textiles tras analizar toda su cadena de valor. Se ha desarrollado con la implantación de 49 puntos de recogida en colaboración con Cáritas.

El llamado proyecto “Moda Circular” cuenta así con contenedores en los centros habituales y outlet de El Corte Inglés. También recopila prendas en sus Oficinas de Compras, dónde se centralizan muestras y productos con taras, roturas o desperfectos de cualquier tipo del almacén de Valdemoro y de los propios departamentos de El Corte Inglés y de Sfera.

Una vez recogido Cáritas somete los artículos a un proceso de identificación para desinfectar las prendas susceptibles de reutilización, a fin de enviarlo a las tiendas moda re- donde pueden comprarse con avales entregados por Cáritas o a precios muy bajos.

Otras prendas se reciclan tras convertir el textil en nuevas fibras para futuras colecciones o para uso secundario de moquetas, interior de almohadones, sofás u otros usos industriales. El textil no aprovechable se incinera en unas fábricas, utilizándose como material combustible para generación de energía eléctrica.

Así de los 240.000 kilos recogidos, Cáritas destinó 120.000 kilos para su reutilización a través de citadas tiendas. El Corte Inglés destinó otros 98.000 kilos a convertirlo en nuevas fibras para futuras colecciones o usos secundarios y 20.000 kilos fue para su combustión como fuente de energía.

Con el proyecto “Moda Circular” El Corte Inglés y Cáritas contribuyen también a la inserción de personas en el mundo laboral. A través de este proyecto se emplea a personas en riesgo de exclusión social en las tiendas de moda re-, con una fase previa de acogida. Según El Corte Inglés, anualmente se generan 400 puestos de trabajo en estas tiendas, con una tasa de reinserción laboral del 70%.