Marlaska hizo esta afirmación en el Pleno del Congreso, donde la diputada del PP Ana Vázquez y el de Vox Ignacio Gil Lázaro le preguntaron si va a dimitir tras anular un juez el cese del coronel Diego Pérez de los Cobos como responsable de la Guardia Civil en Madrid.

“Este ministro del Interior no tiene ninguna intención de dimitir”, afirmó el ministro. Añadió que por lo visto esta jornada en el debate de la Cámara Baja sobre la pandemia de Covid-19, no cree que los populares “vayan a tener votos suficientes para cesarme”, en referencia a que este partido pueda imponerse próximamente en unas elecciones y propiciar así un cambio de Gobierno.

Asimismo, Marlaska respondió a Gil Lázaro que no abandona su cargo porque este diputado de Vox no tendría entonces “ninguna razón para madrugar los miércoles y venir aquí para sus dos minutos de falsedades, de mentiras y de falta de respeto”.

“CADÁVER POLÍTICO”

Además, el ministro emplazó a la diputada del PP a dejar de hacer “teatro” sobre este asunto y dijo al parlamentario de Vox que seguirá en su puesto para continuar devolviendo a Interior la “decencia” que considera permitió con el Gabinete de Mariano Rajoy.

Como hizo este martes en el Senado, el ministro sostuvo que el cese de Pérez de los Cobos fue “legal, ponderado y justo” y llamó a esperar a que se resuelva el recurso planteado contra la sentencia que anula el relevo de este coronel. Reiteró también que no sustituyó a este mando de la Guardia Civil por no facilitarle el informe sobre el 8-M, sino por no investigar la filtración de este documento a la prensa.

Por su parte, Vázquez afirmó que Marlaska es un “cadáver político” que representa la degradación que está sufriendo el Estado con el “sanchismo”, en referencia al Ejecutivo presidido por Pedro Sánchez. La parlamentaria del PP afirmó que el ministro ya no tiene “autoridad moral” para seguir al frente de su departamento, debido a que está “abrasado” por “sus escándalos, su sectarismo, su arbitrariedad y su abuso de poder”.

A su vez, Gil Lázaro se refirió a que los funcionarios de la Guardia Civil, la Policía Nacional e Instituciones penitencias “no se merecen estar a las órdenes de un ministro falaz, sectario e indigno”. Añadió que el titular de Interior se ha convertido el “tonto útil” de Sánchez para ceder del “chantaje de Bildu”, en referencia al acercamiento de presos de ETA que se está produciendo en los últimos meses.