En las cuatro semanas que lleva en la carretera, la expresidenta andaluza ha recorrido cerca de 60 municipios de todas las provincias de Andalucía -salvo Sevilla-, según destacan a Servimedia fuentes del equipo de Díaz.

Aducen que se trata de pisar territorio, hablar en la calle, conocer las quejas de la ciudadanía y la situación de los pueblo de manera directa. Y después trasladar esa situación al Parlamento andaluz para que el Gobierno que preside el popular Moreno rinda cuentas. De ahí las más de 1.500 iniciativas en los últimos días.

En estas visitas, el nexo común es una “dejación” por parte de la Junta al encontrar, según dicen, que hay centros de salud de cerrados o infraestructuras que se encuentran en la misma situación que las dejó hace dos años el gobierno socialista en la Junta.

Aunque las visitas las hace acompañada “siempre” del secretario provincial de turno del PSOE -y de ahí que el confinamiento por Covid-19 de la sevillana Verónica haya retrasado su recorrido por la provincia de Sevilla- “no se habla de tema orgánico”, remarcan desde su equipo.

No obstante, en el trasfondo de esta gira está la situación de la federación más importante del PSOE donde cada vez es mayor el cuestionamiento del liderazgo de Díaz y la reclamación de primarias -a las que solo ella se atrevió ya a decir que irá- que diluciden quién estará al frente del PSOE-A.

Algunos ven en esta estrategia la misma que empleó en su día Pedro Sánchez de recorrer España, en este caso Andalucía, para ganarse a la militancia, pero también hay quienes recuerdan que una de las principales fortalezas de Díaz es el trato personal, la calle, y que este es un momento en el que el ciudadano necesita ser escuchado.