Según informó este viernes la Policía, las investigaciones comenzaron cuando Francia comunicó la retención en el paso fronterizo de La Junquera de dos autocares españoles con destino a Rumanía, cuyos viajeros habían presentado certificados de pruebas de coronavirus falsas.

Los 137 test que se aportaban supuestamente había sido realizados en Barcelona y correspondían a los cuatro conductores y a 133 pasajeros. Los supuestos justificantes se hallaban descargados en los terminales telefónicos de los conductores de los vehículos.

“PLENO CONOCIMIENTO”

Las pesquisas permitieron determinar que detrás de las falsificaciones se encontraban los responsables y algunos trabajadores de la empresa. Con esta información, se procedió, en un primer momento, a la detención de los cuatro conductores como presuntos autores de un delito de falsificación de documentos.

Según la Policía, los conductores tenían “pleno conocimiento de las irregularidades” con los certificados sanitarios, además de ser ellos quienes presentaron y custodiaron los justificantes fraudulentos.

Con posterioridad a estos hechos, fue localizado y detenido el máximo responsable de la empresa y de la trama descubierta, quien residía en la localidad madrileña de Torrejón de Ardoz.