El 71,47% de los que han cobrado en acciones es el porcentaje más alto para esta fórmula de retribución desde noviembre de 2015, cuando se alcanzó el 79,99%.

El pasado diciembre este porcentaje se situó en el 66,88% y en junio de 2020, en el 63,01%.
El porcentaje último supone que el número final de acciones emitidas con este dividendo es de 194,5 millones, equivalentes a un 3,57% del capital social.

Con estas nuevas acciones, el capital social queda compuesto por 5.638,05 millones acciones.
Por lo que se refiere a la proporción del 28,53% de accionistas que se ha decantado por cobrar el dividendo en efectivo, se coloca por debajo del 33,12% de diciembre y del 36,99% de junio de 2020.

Con este porcentaje, el desembolso en efectivo por este dividendo se sitúa en los 307,5 millones de euros (en contraste con los 342,32 millones de diciembre y 370,7 millones de euros de junio de 2020).

Fuentes del sector han señalado que el aumento de la proporción de accionistas que ha elegido cobrar en acciones con respecto a los anteriores pagos “muestra la confianza en los títulos de Telefónica y en el margen que tienen para seguir subiendo”.

La fecha estimada de inicio de la contratación ordinaria de las nuevas acciones es el 30 de junio.