Caixabank
Gortázar adelanta que 7.900 empleados se han adherido ya al ERE frente a las 6.452 salidas previstas
-El banco anuncia un 'pay out' del 50% sobre el beneficio recurrente del 2021 y con intención de "recuperar" el nivel de dividendo "más atractivo y elevado" posible
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El consejero delegado de CaixaBank, Gonzalo Gortázar, desveló este viernes que 7.900 empleados se han adherido ya al Expediente de Regulación de Empleo (ERE) pactado con los sindicatos, superando las 6.452 desvinculaciones previstas y pese a que aún disponen de tiempo hasta las 15.00 horas de hoy para decidir su aceptación.
“Hay una sobredemanda para apuntarse a este programa y es un indicador de que las condiciones que hemos presentado son atractivas y responsables”, explicó durante la presentación de resultados semestrales del grupo, mostrando satisfacción de que “las personas que van a salir lo hacen en buenas condiciones económicas, son parte del grupo y de la historia y del éxito del mismo”.
Las cuentas del semestre recogen precisamente un cargo extraordinario de 1.884 millones de euros para sufragar una reestructuración, lo que, según reconoció, implica elevar las indemnizaciones a los empleados por dejar del banco a una media de 290.000 euros. Las salidas comenzarán a efectuarse a partir del cuarto trimestre de este año.
Frente a la elevada adhesión, el banquero explicó que la entidad tiene que analizar cuántas salidas pueden ser efectivas “porque no se trata de que salgan personas de forma indiscriminada, sino de que salgan personas de los lugares en los que tenemos excedentes”.
En este contexto, Gortázar expuso que el ERE es “exitoso” y supone un “win-win” porque ha permitido “compaginar” el interés del grupo, de mantenerse “competitivo” y “sostenibles desde el punto de vista financiero para el futuro”, y de los trabajadores, ya que todas las salidas serán voluntarias y “las personas que se van a quedar van a estar en un grupo mucho más eficiente y rentable”.
Preguntado por si tendrían que haber mantenido cifras de salidas superiores ante la alta adhesión lograda –la primera propuesta planteada por CaixaBank planteó la desvinculación de hasta 8.291 trabajadores–, Gortázar expuso que las cifras corresponden a “un análisis extremadamente detallado y exhaustivo que se presentó en su momento a los representantes de los trabajadores”, e indicó que el propio banco también entiende que es “mejor” también para la sociedad si mantiene un mayor nivel de empleo.
En este sentido, descartó ampliar la cifra acordada con los sindicatos que pondrá en la rampa de salida a 6.452 trabajadores, por lo que la entidad no atenderá el excedente de demanda por acceder a las condiciones ofrecidas a los trabajadores afectados por el ERE.
Con todo esto sobre la mesa, Gortázar defendió que el ERE es “responsable y razonable” por acogerse a la voluntariedad de los trabajadores, y aseguró que, pese a ser “siempre” una “tarea ingrata”, se ha hecho “de la manera en la que correspondía”.
Por último, Gortázar recordó que las condiciones de la fusión entre CaixaBank y Bankia contemplaba una reducción “importante” de personal que fue aprobada por los accionistas, e insistió en que este acuerdo laboral era “necesario” para reestructurar la entidad de cara a hacer frente a las nuevas tendencias del sector financiero, marcada por la caída de los tipos de interés, que “pone una presión estructural sobre la rentabilidad”, y el nuevo perfil tecnológico de los clientes.
940 MILLONES DE AHORRO EN COSTES
Durante su exposición, Gortázar también apuntó que el ERE ha aumentado la estimación de ahorro en costes desde los 770 millones de euros previstos originalmente hasta 940 millones para 2023. Según el consejero delegado del banco, 590 millones estarían relacionados con las salidas de personal, mientras que los 350 millones restante son fruto de la identificación de nuevas áreas de ahorros.
Así las sinergias totales subirán de los 1.000 millones previstos en un inicio a 1.340 porque espera además otros 290 millones en generación de mayores ingresos por la extensión de negocios y mejores prácticas comerciales al banco fusionados.
FUSIÓN “EXITOSA”
Gortázar también aprovechó para indagar en la evolución de la fusión y valoró que la integración se está realizando de manera exitosa, sin perder negocio ni clientes. En esta línea, señaló que ya son una entidad única, y que han comenzado la “andadura” con “muy buen paso” y con expectativas de superar los objetivos acordados.
Así, CaixaBank logró un beneficio de 1.278 millones de euros en el primer semestre de 2021, y ya cuenta con el 25,1% de los depósitos del mercado español y el 29,3% de los fondos de ahorro a largo plazo.
“Vamos por el camino que nos habíamos marcado y más deprisa de lo que habíamos pensado”, prosiguió el consejero delegado de CaixaBank, quien confirmó que ya se han integrado por completo determinados negocios como la banca privada, de empresas o corporativa, y unificado las direcciones territoriales y los equipos.
“Es un proceso complejo, pero es muy satisfactorio ver cómo vamos por el camino esperado y más rápido de lo que pensamos”, concluyó Gortázar sobre esta cuestión. El siguiente paso de la fusión es la integración tecnológica de Bankia y CaixaBank, que está prevista para el cuarto trimestre de este año.
Respecto a su relación con el presidente de CaixaBank, José Ignacio Goirigolzarri, Gortázar señaló que la “convivencia” de ambos es un “verdadero placer” para él, y que le tiene “muchísimo respeto en lo profesional y en lo personal”.
“Una operación compleja, como lo es la integración de dos entidades, necesita un entendimiento completo de las personas que tienen las mayores responsabilidades y, en este caso, el entendimiento se ha producido desde el principio y se mantiene al 100%”, añadió.
FROB
En cuanto a la futura desvinculación del Estado –que tiene presencia en el accionariado de Caixabank a través del Fondo de Reestructuración Bancaria Ordenada (FROB)–, Gortázar aseguró que respeta las posiciones de todos los inversores, por lo que debe ser el propio Ejecutivo el que decida cuándo quiere salir o mantenerse, al igual que cualquier otro accionista, y añadió que el Estado es un accionista “muy importante” para la entidad.
Respecto al papel del Gobierno dentro de la negociación del ERE, Gortázar reconoció que el “ambiente” ha amasado “comentarios” de “muchas partes de la sociedad”, incluido el Ejecutivo, pero señaló que los intereses de CaixaBank “son los que priman”.
El banquero detalló que la buena evolución del banco y su alta solvencia ha alentado que el Consejo de Administración acordase ayer distribuir el 50% del beneficio recurrente y sin extraordinarios de 2021 en pago de un dividendo en el 2022, cuando el BCE levante la restricción a la remuneración al inversor en septiembre.
Subrayó la "relevancia" que tiene para los 680.000 accionistas del banco, considerándolo "muy buena noticia" para ellos, además de para las instituciones de inversión colectiva como las gestoras de fondos, para la sociedad en la medida que el Estado controla el 16,1% del banco y a través de la Obra Social de la Fundación "La Caixa".
No quiso despejar qué política de dividendo podrá instaurarse a partir del próximo año ya que depende del Consejo y de un plan estratégico trianual por diseñar tras completar la integración operativa, pero sí avanzó que la intención es "recuperar" el nivel de diviendo "más atractivo y elevado" posible.
(SERVIMEDIA)
30 Jul 2021
PTRECR/gja/ecr