Así lo indicó Gil Lázaro durante la sesión de control en el Congreso, donde aseguró que Marlaska se “salvó” de la “quema ministerial” que realizó el presidente del Gobierno en julio porque a Pedro Sánchez “le falló la sustituta en el último minuto”.

Asimismo, señaló que la falsa agresión homófoba del barrio de Malasaña ha vuelto a demostrar la “vileza” de Marlaska porque empezó “culpando” a Vox de esta situación y cuando la policía descubrió que no era una denuncia falsa, “culpó a la policía por no haberle informado antes”.

Al respecto, subrayó que el “único discurso de odio generalizado a gran escala” en España es el “montado por el Gobierno, sus socios y por la izquierda mediática con la que intenta criminalizar a cuatro millones de españoles para excluirlos de la vida política”.

Según Gil Lázaro, se trata de un discurso que está generando “constante violencia física” contra Vox y acusó a Marlaska de “facilitarlo y alimentarlo”. A su juicio, lo hace porque Vox es ya la “única alternativa” para hacer frente a este Gobierno “inútil y sectario” nacido del “colosal fraude electoral cometido por Sánchez a los españoles en las urnas”.

Por todo ello, Gil Lázaro instó a Marlaska a que, si conserva un “mínimo de vergüenza política”, en vez de acudir al Congreso de los Diputados a “decir tonterías”, se vaya “a su casa”.

POLÍTICA DE VALORES

Por su parte, Marlaska manifestó que si las “falsedades” de las que le acusó el diputado de Vox son las razones que tiene este partido para pedir su dimisión, “no tengo ninguna voluntad de dimitir”. A su vez, recomendó al Gil Lázaro mayor “tranquilidad, sosiego” y que en sus discursos políticos tenga “más cuidado” y no exponga la “visceralidad” porque puede ser “mal entendida”.

Además, destacó que su Gobierno está para hacer políticas “progresistas” en materia de seguridad, equiparación salarial, un plan de infraestructuras para policías y guardias civiles, una política migratoria “real y efectiva” y una política de coordinación en materia de protección civil, entre otras.