Crimen organizado

Cae una red que prostituía a mujeres en pisos de citas de Asturias, León y Alicante

MADRID
SERVIMEDIA

La Policía Nacional ha desarticulado en Asturias, León y Alicante una red que prostituía a mujeres en pisos de citas, donde las víctimas, mayoritariamente de nacionalidad colombiana, debían también vender drogas a los clientes para incrementar los beneficios de la trama.

Según informó este jueves la Policía, como integrantes de esta banda han sido detenidas ocho personas en Asturias y Alicante, para cinco de los cuales se ha decretado prisión provisional. Se les atribuyen los delitos de pertenencia a organización criminal, trata de seres humanos, delitos relativos a la prostitución, favorecimiento a la inmigración clandestina y contra la salud pública.

En el marco de la operación han sido liberadas dos víctimas, que como, otras mujeres explotadas por la trama, fueron captadas en su países de origen a través de anuncios en Internet y adquirido una deuda con la red criminal de unos 3.000 euros.

Se han realizado ocho entradas y registros, tres en domicilios particulares de los detenidos -Elche, Mieres y Langreo- y cinco en los pisos de citas ubicados en Mieres (2), Langreo, La Bañeza y Elche. Han sido intervenidos seis vehículos, 14 cuentas bancarias bloqueadas, un bien inmueble inmovilizado y los cinco pisos de citas han sido clausurados.

WEBS DE CITAS

La investigación se inició a través de una denuncia en la que se puso en conocimiento de los agentes la existencia de una organización criminal dedicada, presuntamente, a la explotación sexual de mujeres, mayoritariamente colombianas, en pisos de citas de varias provincias españolas.

Tras varias gestiones, los agentes pudieron constatar que los responsables de la red eran dos parejas, una que operaba en pisos de citas en Mieres y La Bañeza y la otra en Elche, siendo éstos últimos quienes captaban a las víctimas en su país de origen a través de dos contactos que actuaban como intermediarios. A las afectadas se les decía que inicialmente, por ser traídas a España, adquirían con la banda una deuda de 1.500 euros, pero que luego aumentaban hasta 3.000 euros para forzarlas a ejercer la prostitución.

La pareja que operaba en Asturias y León, captaban a las víctimas en España, para ello publicaban anuncios en Internet, hacían uso de webs de citas para anunciar plazas en sus pisos, los cuales eran contestados por mujeres en estado de vulnerabilidad a las que convencían para ejercer la prostitución.

Cuando llegaban a los pisos, se encontraban con otra realidad a la acordada ya que debían estar disponibles las 24 horas del día, sin poder dormir ni descansar, las controlaban con cámaras de video vigilancia y en muchas ocasiones no les pagaban el salario acordado como forma de castigo e imposición de control. Además, debían vender sustancias estupefacientes a los clientes para maximizar los beneficios de la organización, como cocaína, marihuana, viagra y popper.

(SERVIMEDIA)
23 Sep 2021
NBC/gja