Así lo indicó Aragonès en una declaración institucional coincidiendo con el cuarto aniversario del referéndum ilegal en la que consideró a su Gobierno “heredero” del 1 de octubre de 2017 y destacó que este se compromete a continuar “el camino hacia la independencia”, “forzando” una negociación con el Gobierno de España “sin renunciar a nada”.

Acompañado por todos los miembros de su Ejecutivo, declaró que está orgulloso de ese día y se conjuró a trabajar para hacer posible la independencia de Cataluña. “Queremos hacer de Cataluña una república para que la ciudadanía viva mejor, y esto es lo que haremos”, afirmó.

Durante su declaración, destacó que el 1-O representa “un punto de inflexión” en la historia de Cataluña y la “reafirmación” del pueblo catalán en su “soberanía” y en su “defensa de la democracia”. “Es un punto de no retorno”, añadió.

En este sentido, criticó que la respuesta del Estado ante esta situación fue “violencia, represión, judicialización, cárcel y exilio forzosos” y que su “impotencia” se tradujo en “golpes de porra” contra la ciudadanía que quería votar. Pese a ello, apuntó que ni la “violencia” ni la “intimidación” pudieron parar a un pueblo que “había decidido ejercer la democracia”.

Asimismo, recordó que el referéndum del 1-O fue posible gracias al “consenso” de los partidos políticos y de los movimientos sociales, a la “complicidad” de instituciones y la ciudadanía. Para Aragonès, este tiene que ser uno de los “aprendizajes” y dijo que solo avanzarán cuando se generen “grandes consensos”.

Por ello, instó a “continuar estirando esa fuerza”, esa “energía” que “lo podía todo” para culminar el camino a “partir de ahora”. “Lo tenemos que hacer con todos los recursos que tengamos y en todos lados, con la fuerza que nos da esa energía y complicidad con la que abrimos los colegios a las 9.00 de la mañana”, comentó.

Además, abogó por recuperar el “espíritu del 1 de octubre e hizo hincapié en que, si consiguen la “comunión” que tenían en los primeros días de octubre de 2017, “este país es imparable”. Ante de acabar su discurso, pidió la amnistía y la autodeterminación, que es la propuesta “inevitable” si se quiere “resolver el conflicto político”.