Marlaska tuvo este cruce de reproches con el senador del PP Fernando Martínez-Maíllo, quien defendió en el Pleno de la Cámara Alta una interpelación sobre las “prioridades” que está teniendo el titular de Interior al desempeñar su responsabilidad.

El ministro sostuvo que con estas iniciativas parlamentarias lo que hacen tanto el PP como Vox es consolidarle en el cargo, puesto que preguntarle ahora por sus prioridades sólo busca señalarle desde el punto de vista político. Añadió que, últimamente, al ser blanco de las críticas de la derecha, siente que “hace de psicólogo para mucha gente”, en referencia a que al atacarle hay muchos que se desahogan.

En todo caso, Marlaska afirmó que sus objetivos al frente de Interior están siendo “capitalizar, institucionalizar y humanizar” la política de seguridad, que, sostuvo, los populares “destrozaron” durante el Gobierno de Mariano Rajoy.

GESTIÓN “MISERABLE”

Asimismo, el ministro se refirió a que, durante la etapa de Rajoy, los responsables de Interior “recortaban” y “aquello que no suprimían” lo dedicaban a “tapar problemas de corrupción”, en alusión 'caso Kitchen', referido al presunto uso de medios policiales para espiar extrajudicialmente al extesorero de los populares Luis Bárcenas.

A este respecto, Marlaska defendió que en su momento fuera designado vocal del CGPJ a propuesta del PP, algo a lo que hizo alusión el senador Martínez-Maíllo. “Yo en los únicos papeles que he salido es en los de ETA, no sé otros”, dijo al respecto el ministro, en referencia a que como juez estuvo amenazado por la banda terrorista, pero nunca ha aparecido en algo como los 'papeles de Bárcenas'.

Por su parte, Martínez-Maíllo sostuvo que Marlaska es “un desastre total como ministro” y le preguntó si “no se cansa de hacerle el trabajo sucio” a Sánchez, como, dijo, ha hecho al acercar a todos los presos de ETA para que EH Bildu apoye al Ejecutivo en el Congreso.

El senador popular añadió que el titular de Interior estaba haciendo una “gestión miserable”, ya que así se podían calificar sus “purgas” en la Guardia Civil o que la directora general de este cuerpo, María Gámez, hiciese campaña electoral por el PSOE en las elecciones madrileñas de mayo pasado. Respecto a las alusiones de Marlaska al 'caso Bárcenas' y el 'caso Kitchen', este parlamentario dijo que el PSOE es el “único” partido condenado por terrorismo de Estado, por los GAL, y por el uso irregular de los fondos reservados de Interior.