Así se puso de manifiesto durante la celebración de la VIII Reunión Virtual de Pacientes Crónicos Complejos de la Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI), en la que también se consignó que el 50% de los ingresos pueden deberse a patologías descompensadas de pacientes crónicos complejos.

Durante el encuentro, se disertó sobre patologías crónicas como la Fibrosis Pulmonar Idiopática (FPI), sobre la que el doctor Norberto Ortega apuntó que predomina en varones mayores de 50 años y tiene un desarrollo crónico e irreversible; y la Enfermedad Pulmonar Intersticial Difusa (EPID), que se da en pacientes más jóvenes (entre 20 y 60 años), con menos prevalencia de varones, afectando a 75 de cada cien mil habitantes y evolucionando a fibrosis en un 13-40% de los casos.

Sobre la relación entre diabetes y enfermedad cardiovascular, el doctor José María Fernández puso de manifiesto que ambas patologías tienen una “raíz común”, ya que se da en muchos casos en pacientes sedentarios, con hipertensión, dieta pobre, tabaquismo, obesidad y dislipemia, lo que le permitió recordar que el 80% de las personas con diabetes fallecen como consecuencia de una enfermedad cardiovascular.

Por su parte, los doctores Carlos Jiménez, Javier Castilla y Raquel Fernández coincidieron en la necesidad de que se incentive y reconozca en el Sistema Nacional de Salud (SNS) la importancia de la formación continuada y la adquisición de competencias extracurriculares.

Por su parte, el doctor Emilio Casariego expuso la experiencia del uso de telemedicina durante la pandemia para seguir a pacientes infectados de Covid-19 en Lugo. Lo hizo constatando que el 79,6% de ellos cumplimentó correctamente los protocolos, que la mediana de días en seguimiento fue de 15, y que se constató que “la telemedicina es una herramienta útil en el seguimiento domiciliario de pacientes Covid-19, que es relativamente sencilla de implementar, bien aceptada y con buena adherencia”.

También adujo que “no se apreciaron problemas de seguridad”, que “en los casos nuevos reduce la afluencia a Urgencias, los ingresos hospitalarios y la mortalidad, así como la estancia hospitalaria” y que, “tras el alta, reduce los tiempos de estancia de ingreso hospitalario sin aumentar la mortalidad ni los reingresos”.

Por último, el doctor Javier García Alegría indicó que la cronicidad y la continuidad asistencial son el gran reto, subrayando que la pandemia ha puesto de manifiesto la “necesidad perentoria e ineludible” de “cambiar la estructura y la organización de la atención médica en los hospitales”.