Así lo indicó su secretario general, Luis Aribayos, durante su intervención en la mesa de diálogo ‘El futuro de las empresas en la era postCovid’, organizado por Servimedia, en la que también participaron el director general de Forética, Germán Granda, y la directora general de Grünenthal, Ana Martins.

El representante de Cepyme señaló que “hay que ser optimistas” y que tanto la crisis de la Covid-19 como los fondos europeos suponen “una oportunidad”, pero, al mismo tiempo, mostró su “preocupación” porque “es difícil” trasladar al tejido productivo una magnitud tan grande de recursos.

En este sentido, afirmó que “los antecedentes no son muy positivos”, mencionando como ejemplo “muy cercano” que el fondo de ayudas de 7.000 millones de euros para pymes y autónomos tiene un nivel de ejecución de tan sólo el 20% o 25%, dependiendo de la comunidad.

“Esto nos tiene que valer para aprender”, declaró, para añadir que “esos fondos no tendrán éxito si no llegan al conjunto del territorio y del tejido productivo”, por lo que “tiene que llegar a las pymes”. “Esto no es fácil”, continuó, matizando que “para la inmensa mayoría de las pymes, su relación con la administración se reduce a pedir impuestos y no subvenciones, y en muchos casos su percepción no es buena sobre el hecho de pedirlas”.

Asimismo, destacó la importancia del tiempo de ejecución de los fondos porque “cuando hace falta ese dinero es ahora” para lograr la solvencia y supervivencia de las pymes, así como ayudarlas a avanzar en cuestiones como la digitalización. En este sentido, Aribayos aseguró que “la pyme española ha sufrido mucho” porque “apenas ha recibido ayudas” frente a los cierres, al contrario que otros países de la UE, por lo que advirtió de que “en algún momento pagaremos” esta cuestión.

El representante de Cepyme subrayó el “esfuerzo titánico de la empresa española por sobrevivir”, y declaró que el problema de las pymes es “extremadamente dramático” por la facilidad para que cierren y la dificultad para luego recuperarlas en el medio y largo plazo. A este respecto, indicó que en la crisis de la Covid ya se han perdido 40.000 empresas y que en la de 2008 se perdieron 100.000, sin que se hubieran llegado a recuperarse en 2019.

Aribayos también resaltó la importancia de la empresa ante el reto demográfico y la despoblación de parte del territorio, al considerar que “no hay mejor manera de afianzar personas a un territorio que la empresa”, por lo que, aunque apuntó que “la tendencia mundial va hacia que las ciudades monopolicen el crecimiento”, señaló que la tecnología y la digitalización pueden facilitar la deslocalización de actividad económica en estos territorios con menos población.

REFORMA LABORAL

Por otro lado, preguntado por la reforma laboral que quiere realizar el Gobierno de coalición, el secretario general de Cepyme criticó que “lo que se ha planteado no es lo que está demandando Europa” y resaltó que la reforma pretendida por el Ejecutivo introducirá “rigidez” en el mercado laboral.

Por ello, reprochó que mientras la inversión de los fondos europeos es “tremendamente positiva”, hay dudas sobre cómo y cuándo llegarán. “Son reformas que nos preocupan muchísimo”, afirmó, porque, “ahora más que nunca, la imagen que traslademos es fundamental” y “la seguridad jurídica es importantísima”.

En cualquier caso, Aribayos ensalzó el papel desempeñado por el diálogo social y el “esfuerzo” tanto de sindicatos como organizaciones empresariales, asegurando que el diálogo social es una “infraestructura fundamental”, por lo que reconoció “la potestad” del Gobierno para tomar decisiones como la de la reforma laboral y el SMI y que, aunque estas se aprueben sin el acuerdo con la patronal, “no quiere decir que esta infraestructura no vaya a seguir siendo un referente”.

Por su parte, el director general de Forética, Germán Granda, resaltó que “España ha sido un ejemplo de compromiso empresarial durante la pandemia”, destacando “el esfuerzo que se ha realizado” para garantizar la producción y suministro de material sanitario, medicinas y alimentos. Además, resaltó que la crisis de la Covid-19 ha permitido “acelerar” procesos como el de la digitalización de las empresas, la aplicación del teletrabajo o el de la sostenibilidad medioambiental.

En esta misma línea, la directora general de Grünenthal, Ana Martins, subrayó la aceleración de estos procesos, en especial la digitalización y la aplicación de las tecnologías, al apuntar que “hay una demanda por nuevas posiciones muy relacionadas con las tecnologías, con los datos, la ciberseguridad o el marketing digital”.