La fusión es "favorable para ambas empresas, especialmente para sus accionistas", indicó Del Pino, quien agregó que la nueva compañía será más eficiente, estará más diversificada, tendrá una "cotización más estable y un mejor acceso a los mercados de capitales".

Además, el máximo responsable de Ferrovial subrayó que la fusión permitirá una mayor coordinación entre la actividad de construcción y la promoción de infraestructuras, y se pondrá un mayor énfasis en "proyectos desde cero".

Desde que se anunciara la fusión de Cintra y Ferrovial el pasado mes de junio, las acciones de la primera se han disparado un 50% y las de la segunda un 25%, recordó Del Pino.

FUSIÓN INVERSA

La fusión proyectada se arbitrará mediante la absorción de Ferrovial por Cintra con extinción, vía disolución sin liquidación de la absorbida y transmisión en bloque de todo el patrimonio de la primera a la segunda.

La estructura elegida es, por tanto, la denominada fusión "inversa", que se caracteriza por ser la filial la que absorbe a la matriz.

La operación fija una ecuación de canje de cuatro acciones de Cintra, de 20 céntimos de euro, por cada acción de Ferrovial, de un euro de valor nominal.

Para esta operación, Cintra deberá ampliar su capital social en el importe preciso para hacer frente al canje de las acciones. El aumento se realizará mediante la emisión de un número máximo de 556,05 millones de acciones de 20 céntimos de euro cada una.

Los accionistas de Cintra se pronunciarán sobre la fusión en la Junta General Extraordinaria que se celebrará el jueves 22 de octubre. Tras la fusión y la necesaria ampliación de capital, la familia Del Pino verá reducida su participación en el Grupo Ferrovial del 58,3% al 44,6% del capital social.