El portavoz del BNG, Francisco Jorquera, denunció una "total y absoluta falta de correspondencia" entre las palabras de Salgado y el contenido del proyecto, ya que en el texto no ve la progresividad fiscal de la que habla el Gobierno ni la austeridad en los gastos corrientes, sino más bien una reducción de las inversiones que serían necesarias para materializar el cambio de modelo productivo.

Para Rosa Díez, de UPyD, el discurso de Salgado "no ha frustrado ninguna expectativa". "Nada esperaba, y nada he obtenido", aseguró, ya que las palabras de la vicepresidenta contenían las mismas "falsedades" que el proyecto y se confirma que España es con este Gobierno un Estado "residual".

Después de reclamar a los ciudadanos y a los grupos parlamentarios "fe y esperanza" en la capacidad del Gobierno para salir de la crisis, Díez ironizó al asegurar que temía que Salgado "de un momento a otro nos hablara de caridad".

También para Uxue Barkos, de Nafarroa Bai, los Presupuestos carecen de la ambición necesaria para sacar a España de la crisis, tanto en política fiscal como en inversiones, y la prueba más palpable es, en su opinión, la reducción de los recursos dedicados a I+D+i.

Sólo Coalición Canaria expresó su respaldo al Gobierno porque, según su portavoz, José Luis Perestelo, se ha abierto "un nuevo marco de relación" con el Gobierno que ha permitido, entre otras cosas, sacar adelante medidas concretas para atajar el crecimiento del paro en las islas.