Así lo hizo en un acto institucional que tuvo lugar este jueves, como conmemoración del Día Universal para los Derechos de la Infancia y la Adolescencia que tendrá lugar el próximo sábado.

El evento, organizado por el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030 bajo el título 'Hacer realidad la Lopivi’ (Ley Orgánica de protección integral a la infancia y la adolescencia frente a la violencia), contó con la participación de la ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra, y en él intervinieron Jorge Cardona, ex miembro del Comité de los Derechos del Niño y catedrático de Derecho Internacional en la Universidad de Valencia; Vicky Bernadet, resiliente de abusos sexuales infantiles y presidenta de la Fundación Vicky Bernadet; Tomás Luis Martín, magistrado del Juzgado de Violencia contra la infancia y la Adolescencia de Las Palmas de Gran Canaria; Álex Roca, atleta y embajador de la Fundació FC Barcelona; Macarena Céspedes, vicepresidenta de la Plataforma de Infancia; y Nacho Álvarez, secretario de Estado de Derechos Sociales. Estuvo presentado por la actriz Itziar Castro y contó con el cierre musical de Aaron Lee, violinista y presidente de la Fundación Arte que Alimenta.

Belarra se mostró emocionada por la unión de todos los presentes “con un objetivo común, levantar un manto de silencio que en todos los países invisibiliza la violencia hacia niñas, niños y adolescentes”. “Nos reunimos aquí para escuchar a personas que trabajan cada día con ellos y también quienes han transformado su experiencia en un ejemplo de supervivencia y de transformación del dolor en acción social y política para que nadie más sufra lo que ellos sufrieron. Estamos para reflexionar cómo convertir un texto pionero a nivel mundial como la ‘Ley Rhodes’ en cambios concretos para la infancia española", añadió.

La ministra continuó su intervención dando las gracias a todos los presentes, de los que afirmó estar segura de que su valentía “ha conseguido algo que es muy importante, que muchos niños, niñas y jóvenes dejen de sufrir en silencio y se atrevan a denunciar y tengan la certeza de que es posible sobreponerse a la violencia”. “Habéis cambiado vidas con vuestra generosidad, y ahora las administraciones vamos a seguir vuestro ejemplo y desarrollar esta ley”, añadió. “Uno de mis compromisos como ministra fue desarrollarla, y ahora es mi compromiso que se despliegue”.

La ministra tuvo también palabras para el indulto parcial que esta semana concedió el Consejo de Ministros para Juana Rivas, de quien afirmó que era “un ejemplo para las mujeres que protegen a sus hijos frente a la violencia de género”, y estableció “procurar seguridad a los niños” como “una obligación de toda la sociedad y especialmente de las administraciones públicas”.

“Con la Ley Orgánica de protección integral a la infancia y la adolescencia frente a la violencia (Lopivi) hemos, entre otras cosas, ampliado la prescripción de los delitos de violencia sexual para que no empiecen a contar hasta que la víctima tenga 35 años; hemos desarrollado procedimientos para evitar revictimización y eliminado la etiqueta de síndrome de alienación parental”, explicó. "Esta ley nos pone a la vanguardia en la protección de sus derechos y nos interpela a las administraciones públicas a ponernos a escuchar y a trabajar para que sea realidad en todo el país”, añadió, estableciendo objetivos que ya querrían tener realizados para el próximo curso, como la asignación de coordinadores y delegados de protección en centros educativos y deportivos, respectivamente.

“Sabemos que el Estado y la sociedad no llegan a tiempo y tenemos que trabajar en que eso cambie”, aseguró. ”Tenemos que trabajar en apoyar a las víctimas para que puedan afrontar los derechos sociales y que no tengan que revivir las situaciones de violencia, que encuentren en las instituciones abrigo y protección, cuestiones que se recogen en la ley”, señaló Belarra, resaltando también las consecuencias que para las víctimas tienen estas violencias.

“Esta ley lucha contra las violencias que se ejercen a través de las nuevas tecnologías. Nuestros niños experimentan la apertura a nuevos espacios de socialización que tienen enormes oportunidades, pero que también presentan riesgos como el grooming, el ciberbullying o la ciberviolencia de género, lo que crea una realidad dolorosa que muchos niños que son o han sido víctimas sabrán reconocer, como es que sienten que no hay ningún espacio físico donde puedan sentirse seguros si tienen un móvil o que algunas muestras de ese acoso quedarán para siempre en la red y les provocarán situaciones de vergüenza, destrozando sus infancias y adolescencias”.

Asimismo, la ministra resaltó datos como que uno de cada cuatro niños conocen a un compañero que ha sufrido ciberbullying en un contexto en el que han aumentado un 65% las agresiones grupales. Por ello, afirmó que, ya el pasado lunes, su departamento y las comunidades autónomas habían alcanzado un acuerdo por el que, antes de mayo, las autonomías deberán mejorar los canales de denuncias de violencia digital hacia la infancia.

“LA MEJOR LEY DEL MUNDO”

Por su parte, Jorge Cardona, como experto en legislación sobre menores, se enorgulleció del aniversario de la firma de la ‘Convención de los Derechos del niño”, pero también por la creación de la Lopivi, que definió como “la mejor ley en el mundo”. Asimismo, comparó la situación española con la noruega, aunque aseguró que realmente no son comparables porque lo que existe allí a este respecto es un acuerdo interministerial.

“Hay que difundirla porque no solo protege a los niños, sino que también los tiene como sujetos de derecho, y ya nos están llamando en otros sitios para ir a explicar su contenido”, explicó. “Debemos felicitarnos para agradecer no solo al gobierno y a los grupos parlamentarios, sino también a la sociedad en general”, apostilló.

Por su parte, Vicky Bernadet agradeció la oportunidad de estar en esta conmemoración, a la vez que resaltó su situación como “superviviente de abusos sexuales”, pues sufrió violencia sexual de los 5 a los 17 años, aunque tiene 67 y la denunció a los 34. Cuando lo hizo, según explicó, percibió una realidad muy dura, “que las víctimas no existíamos y éramos invisibles, no teníamos credibilidad. Recibí incomprensión, miedo, y sobre todo soledad", denunció.

"Ha habido muchos pasos adelante, hemos evolucionado con respecto a los derechos de la infancia, pero ha habido niños que se han hecho adultos sin haberlo contado. Uno de cada cinco niños y niñas sufren abusos sexuales, y entre el 80 y 85% de estos abusos se producen dentro del entorno familiar y de confianza. Son datos alarmantes, no exagerados; y a veces cuesta transmitir eso a la sociedad, que se ha anclado al ‘a mí no me puede pasar’”, explicó, al tiempo que definió la ley como un “instrumento necesario y vital para proteger a nuestra infancia que salvará vidas”.

En la misma línea se manifestó el magistrado Tomás Luis Martín, quien animó a crear entornos amigables en los juzgados y a establecer formaciones jurídicas en estas líneas “para obtener mejores resultados en la obtención de pruebas”, y repasó la evolución que esta disciplina había tenido en su entorno de trabajo, pionero en España, en los juzgados de Las Palmas de Gran Canaria.

Por su parte, el atleta Álex Roca, quien participó en la Titan Desert 2019 y acudió al acto con su pareja y, a su vez, intérprete de Lengua de Signos, agradeció que se le permitiera estar en el acto, y se mostró contento por la existencia de la ley por considerar que representa “un cambio para muchos niños y niñas”, a quienes animó a aprender en valores y a convertir los "no" que se reciban al querer hacer algo en "sí".

“LÍMITES”

El atleta también habló sobre los “no” que había recibido durante su vida, como la ocasión en la que le dijeron que tardaría dos años en sacarse un grado medio de formación profesional que duraba un año, o cuando no quisieron darle, después de estudiarlo, su título como integrador social porque “estaba para integrar” y “no podría mover una silla de ruedas ni hablar en lengua de signos”; y aseguró que su lema vital es que “los límites te los pones tú”.

Macarena Céspedes definió la ley como “una ley muy necesitada que las organizaciones de infancia hemos demandado muchos años”, pues aseguró que ”nuestro sistema normativo no se ajustaba al enfoque de protección integral y no tenía enfoque de derechos de la infancia”. Resaltó que “la violencia ha sido categorizada por Naciones Unidas como pandemia”, al tiempo que tendió la mano de las entidades que trabajan con niños para apoyar en el despliegue de la nueva normativa.

El acto fue concluido por el Secretario de Estado de Derechos Sociales, Nacho Álvarez, quien agradeció a las personas que durante años han trabajado en este ámbito, y animó a fijarse en la violencia invisible, como el lenguaje humillante que muchos niños ven en sus casas, centros de estudios o deportivos; y que acaban naturalizando, produciéndose situaciones “que generan miedo, impotencia y adaptación a formas de obediencia extremas; y la convivencia y naturalización de niños con esos comportamientos”; y llamó a la gobernanza y coordinación entre diferentes administraciones públicas para "convertir la ley en realidad". “Esperemos el año que viene volver a vernos aquí con las primeras fases de esta ley ya implementadas”, concluyó.