Así se desprende del estudio ‘Atlas Concursal 2021’ elaborado por el Registro de Economistas Forenses (Refor), órgano especializado del Consejo General de Economistas en materia de insolvencias, y presentado este martes.

En la presentación participaron el presidente del Consejo General de Economistas de España, Valentín Pich; el presidente del Refor, Juan Carlos Robles; el profesor de Economía, Javier Santacruz, y el secretario técnico del Refor, Alberto Velasco.

En su intervención, Pich indicó que “tanto los datos concursales de 2020 como los relativos a 2021 y 2022 están condicionados por los efectos de la Covid-19 así como por las medidas que se han venido aplicando”. En este sentido, para el presidente de los economistas “la moratoria concursal vigente hasta el 31 de diciembre 2021 ha servido para contener el incremento concursal previsible; aunque no parece que una vez finalizada la moratoria se vaya a producir una acusada avalancha concursal tan elevada como se pensaba”.

En cuanto a las cifras consolidadas de 2020, en España se produjo una disminución del 3,3% en el número de concursos de empresas con respecto a 2019, al pasar de 4.789 en ese año a 4.630 en 2020. En el bloque específico de autónomos, micropymes y pequeñas empresas el número de concursos cayó un 4% respecto a 2019, al pasar de 4.154 a 4.008.

La cifra va en línea con la de otros países europeos, donde también hubo un descenso generalizado del número de insolvencias respecto de 2019, como Alemania (-9%), Francia (-36%), Reino Unido (-28%), Italia (-33%) y Portugal (-12%). Según los expertos, estas cifras pueden deberse a las “moratorias concursales y ayudas concedidas para paliar los efectos económicos de la Covid-19”.

Asimismo, en la presentación se subrayó que España es el país con “menor ratio concursal”, pues “solo 13 de cada 10.000 empresas” presentan concurso de acreedores, frente a la media europea, en torno a 52 empresas en concurso por cada 10.000.

A este respecto, el presidente de Refor señaló que los empresarios “no encuentran ningún aliciente” para solicitar el concurso pues “el 96% de las empresas que empiezan acaban liquidadas”. Para Robles, la razón “fundamental” es “evitar la responsabilidad personal que tiene el órgano de administración”.

Por el contrario, los concursos de personas físicas crecieron un 35% en 2020 respecto a 2019, al pasar de 2.983 a 4.032, y han representado el 47% del total de concursos. Según el experto, esta cifra se comenzó a incrementar en el año 2015, a partir de la introducción de la Ley de segunda oportunidad. No obstante, el incremento de este último año puede responder a que las personas físicas fueron las más afectadas por la pandemia.

En cuanto a la distribución geográfica, los concursos solo crecen respecto a 2019 en Cataluña y la Comunidad de Madrid y alcanzan los 1.253 y 859, respectivamente. Comunidad Valenciana, con 716, y Andalucía, con 400, son las otras dos regiones donde se superan los 250 concursos. Las cuatro comunidades acumulan el 70% del total.

LEY DE REFORMA CONCURSAL

En la presentación, el presidente de Refor también señaló al respecto del Anteproyecto de Ley de Reforma Concursal que presenta mejoras en cuanto al “adelanto en la detección de la probable insolvencia, el fomento de las reestructuraciones, el mayor peso del contenido económico en la gestión de las insolvencias o que las competencias en concursos de personas físicas hayan vuelto a los juzgados de lo mercantil”.

No obstante, el experto criticó acerca del nuevo texto “el excesivo peso del papel del deudor en los procedimientos para microempresas, el paso atrás en los mecanismos de segunda oportunidad, la desregulación de los profesionales de la insolvencia o la falta de un testeo eficaz que garantice el pleno funcionamiento del nuevo procedimiento electrónico”.