El 35% de los tratamientos de control de chinches realizados, se lleva a cabo en viviendas, el 30% se realiza en hoteles, hostales y pensiones, el 10% en albergues, y el 5% en hostelería, según el estudio que Anecpla presentó en Expocida Iberia.

Entre las causas que han provocado este incremento de chinches se encuentra el cambio climático, con inviernos cada vez más templados, la globalización, el incremento del turismo, el tránsito de mercancías y equipajes contaminados, así como la falta de inspecciones y el uso inadecuado de insecticidas, según explicó la directora general de Anecpla, Milagros Fernández.

El incremento de las plagas urbanas provoca, según Anecpla, una amenaza biológica de enfermedades emergentes y reemergentes. Fernández concluyó que “no hay que ser alarmistas, pero hay que estar atentos para que las enfermedades no puedan transmitirse”.