Así lo dijo en una rueda de prensa celebrada en la Cámara Baja, donde presentó, junto con la diputada Caridad García, las jornadas de debate “La educación pública, nuestro compromiso”, que tendrán lugar los días 20 y 21 de abril, organizadas por el Grupo Parlamentario IU-ICV-CHA: La Izquierda Plural, en colaboración con el Área Federal de Educación de IU.

En una rueda de prensa celebrada en el Congreso de los Diputados, Cayo Lara dijo que el objetivo de estas jornadas es que la comunidad escolar ponga en común en qué situación se encuentra la educación pública.

A su juicio, “los recortes no son la solución, sino el problema”, pues cuando se producen en educación no logran sino “empobrecer a la sociedad y aumentar las desigualdades”. “La educación pública, universal y gratuita nos iguala a todos los ciudadanos”, añadió.

Insistió en que hay alternativas a los recortes, como son la lucha contra el fraude fiscal para recaudar los 60.000 millones que evaden determinadas empresas y concienciar a los ciudadanos para que “defraudar no sea deporte nacional, sino obligación de todos”.

Por su parte, la portavoz de IU en la Comisión de Educación y Deporte del Congreso de los Diputados, Caridad García, dijo que el ministro del ramo, José Ignacio Wert, ya es conocido como “el ministro de la wertgüenza”, gracias a los recortes y medidas que quiere emprender.

FALTA DE MEDIOS

Agregó que, según una reciente encuesta del CIS, la causa principal de los problemas en la educación es la falta de medios y recordó que en los dos últimos ejercicios presupuestarios se ha recortado en este campo 3.400 millones, a lo que hay sumar 3.000 millones más adicionales.

Caridad García explicó que esos recortes afectarán a las escuelas infantiles, que dejarán de existir “tal y como las conocemos”; a la formación permanente del profesorado, “algo básico” para el sistema educativo, y a las becas, entre otros aspectos.

Se mostró convencida de que estos recortes desembocarán en una subida de las tasas universitarias, lo que hará que muchas familias tengan “difícil, complicado, por no decir imposible”, el acceso a una titulación superior.