Según recordó hoy el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, la decisión debe ser aprobada por el Consejo de Ministros, y “se ha hecho considerando que la disponibilidad de agua en cabecera del Tajo lo permite”.

Según indica, los embalses de Entrepeñas y Buendía disponen actualmente de 374 hm3, y la Ley de Explotación permite trasvasar a partir de 240 hm3.

El desembalse para las Tablas de Daimiel, de hasta un máximo 20 hm3, deberá estar condicionado “a conseguir que el aporte hídrico al parque sea lo más efectivo posible”. Para ello, se hará efectivo en el momento que mejor pueda garantizarse la efectividad de llegada del agua a las Tablas.

POR LA TUBERÍA DE LA LLANURA

Para poder conseguir la máxima efectividad del trasvase al parque, se construirá una “obra de emergencia” que permita utilizar de forma provisional la parte de tubería de abastecimiento a la Llanura Manchega y el cauce del río Gigüela en su tramo húmedo, que es el cauce habitual para la circulación de desembalses al parque.

Además, se llevará a cabo después de la humectación que producirán los bombeos de agua que están previstos y en cualquier caso el volumen a trasvasar “estará condicionado por las circunstancias de humectación que haya en el momento que se haga el trasvase”.

La Comisión acordó también elevar a definitiva la propuesta provisional que aprobó en su reunión del pasado 7 de octubre para el envío de 21,9 hm3 para abastecimiento a la Mancomunidad de Canales del Taibilla, y 25 hm3 para regadíos.