Casado hizo estas consideraciones en la rueda de prensa que dio en la sede de su formación tras reunir al Comité de Dirección Nacional, al que fue invitado Mañueco, quien recibió el apoyo de sus compañeros de cara a los comicios del 13 de febrero.

En este sentido, el líder de los populares defendió que Mañueco tomó por iniciativa propia adelantar las elecciones, algo que estimó apropiado debido a la “deslealtad tremenda” que supuso que Ciudadanos no consultase con el PP que estaba negociando enmiendas a los presupuestos autonómicos con otras fuerzas políticas.

Según Casado, esta es la explicación del adelanto electoral en Castilla y León, puesto que él “nunca” ha solicitado a un presidente autonómico del PP que pusiese fecha a sus comicios, algo que se ha apuntado en distintos medios de comunicación. “Es falso”, remarcó al respecto.

“CAMPAÑA MUY PEGADA AL TERRENO”

Asimismo, se refirió a que el PP tiene intención de hacer una “campaña muy pegada al terreno” para la cita con las urnas del 13 de febrero. El líder popular apuntó que, además de participar en actos con Mañueco, él dará mítines propios debido a que es natural de Castilla y León y ha sido diputado por Ávila muchos años.

Indicó que será un modelo de campaña similar al que el PP ya aplicó con “excelentes” resultados en Galicia, Andalucía o Madrid. En el caso de Castilla y León insistió en que los populares actuarán
“pegados” a los problemas de esta comunidad autónoma.

Sobre la demanda de la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, de que se celebre cuando antes el congreso de los populares madrileños, Casado señaló que en su equipo están “centrados” en los comicios del 13 de febrero. Añadió que, tras esta cita con las urnas, “se reiniciará” el calendario de los cónclaves autonómicos del PP, respecto a los que dijo que “se están cumpliendo los plazos”.

Por otra parte, Casado insistió en que su preferencia para gobernar tras las próximas elecciones generales es formar un Ejecutivo sólo del PP, sin integrar a Vox. Indicó que sería algo similar a lo hizo Ayuso tras los comicios, cuando los diputados del partido de Santiago Abascal se abstuvieron debido a que la presidenta madrileña sumaba más escaños que toda la oposición de izquierdas.